PERÚ E INVERSIÓN EXTRANJERA: ENTRE EL NARCOTRÁFICO Y LA GUERRILLA DE "SENDERO LUMINOSO"

Los remanentes de Sendero Luminoso ratificaron su decisión de mantener la lucha armada como instrumento para llegar al poder en Perú, pese a los anuncios de su ingreso a la política como un partido político y se jactaron de los atentados perpetrados contra las Fuerzas Armadas, según consta en el último número de la revista virtual “Sol Rojo”, vocero electrónico del grupo terrorista peruano.

Mientras que Elena Iparraguirre, cabecilla de este grupo terrorista, anuncia desde Lima su ingreso a la política como partido político, desde el internet, Sendero Luminoso refiere en su editorial que el “pensamiento Gonzalo” les brinda los fundamentos con los que se concreta el partido militarizado en su llamada “lucha armada”.

Agregan como para dejar en claro que mantienen su posición violentista que “luego de la detención de nuestra Jefatura, pese a su aislamiento absoluto, el Partido (...) ha mantenido firmemente el rumbo en las situaciones cada vez más complejas del desarrollo de la guerra, solucionando el problema de dirección, defendiendo las conquistas de la guerra popular y recuperando lo perdido”.

Rechazan cualquier “acuerdo de paz” por considerar que “eso es vender la revolución por un plato de lentejas” para servir al plan del "imperialismo" de desarrollo de sus guerras genocidas.

Asimismo, demanda a sus seguidores “empuñar cada vez más el discurso del presidente Gonzalo como arma de combate”, en referencia al discurso dado por Guzmán el 24 de setiembre de 1992 durante el Tercer Pleno del Comité Central de SL en el que instaba a “aplicar la Guerra Popular para conquistar el poder”.

Dentro de sus objetivos, según afirman, "a corto plazo se encuentran la realización del nuevo congreso del partido para dar el más alto reconocimiento orgánico a la nueva dirección, al comité central, aprobar los nuevos planes para la construcción de los tres instrumentos de la supuesta revolución: el partido, el ejército y el frente/nuevo poder y dar un nuevo gran salto en la incorporación de las masas a la guerra popular”.

En este contexto advierte que “el Partido enfrenta mediante la guerra popular de resistencia el imperialismo yanqui haciendo volar todos sus planes en la política y el campo de batalla, desarrollando así las condiciones necesarias para la realización del nuevo Congreso del Partido”.

Contra García y las FF AA

Consideran al presidente Alan García como un “enemigo” que tiene “la necesidad de aplastar a sangre y fuego la creciente protesta popular” y califican al gobierno democráticamente elegido como “fascista y genocida”.

De otro lado, respecto a los atentados perpetrados contra las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, afirman de manera jactanciosa que los difundidos por la prensa “solamente constituyen una pequeña parte del conjunto de las acciones militares que viene efectuando el Ejército Popular de Liberación (EPL) en pro de la guerra popular en el Perú”.

Pese a ello, se enorgullecen de que las FF AA y PNP se hayan visto obligadas a reconocer varias de sus acciones armadas. “Es siempre un gusto cuando tu adversario, muy a su pesar, te da la razón”, dicen.

Finalmente hacen un llamado a “todas las personas y organizaciones que están comprometidas con la defensa de los prisioneros políticos y de guerra revolucionaria del mundo, a exigir la presentación pública del ‘presidente Gonzalo’, como parte de la defensa de la vida y los derechos de los prisioneros de guerra y presos políticos revolucionarios del mundo”.