PARADA MILITAR BICENTENARIO EJERCITO DE CHILE 2010

PARADA MILITAR BICENTENARIO EJERCITO DE CHILE 2010
BICENTENNIAL MILITARY ARMY OF CHILE 2010

REPORTAJES ESPECIALES E INFORMACIÓN ADICIONAL

viernes, 2 de octubre de 2009

ECUADOR SE REARMA : ¿DEFENSA O ALGO MAS?


El Ministerio de Defensa ecuatoriano mantiene una intensa actividad en materia de adquisición de armamento. En un año, Ecuador ha iniciado, y en varios casos completado, acuerdos de material bélico con al menos ocho países.

Mientras el gobierno del presidente Rafael Correa se refiere al fortalecimiento de la capacidad militar nacional, algunos analistas hablan de "afanes armamentistas" y de una respuesta a una complicada dinámica regional en asuntos militares.
El pasado lunes, el presidente Rafael Correa confirmó la aceptación por parte de Ecuador de seis aviones Mirage-50 donados por Venezuela.
A ello se suman las negociaciones para la compra de 12 aviones Cheetah a Sudáfrica y 24 aviones Súper Tucano a Brasil, así como las adquisiciones ya efectuadas de siete helicópteros a India, seis aviones no tripulados llegados en junio desde Israel, dos fragatas compradas a Chile, dos helicópteros a Rusia y dos radares a China.
De concretarse todas las negociaciones en curso el gasto en material bélico alcanzaría unos US$400 millones, según cifras dadas a conocer por las propias autoridades militares.

¿MATERIAL OBSOLETO?
En el país ha despertado una polémica el hecho de que tanto los aviones de Venezuela -país que ha alcanzado un acuerdo con Rusia para la compra de armamento por US$2.200 millones- como de Sudáfrica constituyen material dado de baja por dichos países.
En el caso de los Mirage-50 venezolanos, se trata de aviones construidos a fines de los años 60, más viejos que los Mirage F1 que tiene Ecuador, fabricados en 1979 y de los cuales solo uno se encuentra operativo.
De otro lado, en el caso de los aviones de Sudáfrica, dicho país los dio de baja en 2008, pero el presidente Correa ha afirmado que esas aeronaves han sido modernizadas.
El ministro de Defensa ecuatoriano, Javier Ponce, quien prepara un viaje a India para buscar acuerdos adicionales en materia de Defensa, ha dicho que las aeronaves donadas por Venezuela fueron mejoradas en 1995 y servirán para adiestrar a pilotos ecuatorianos.
A ello el presidente Correa ha añadido que los aparatos incluso servirán para obtener repuestos para reactivar algunos de los Mirage F1 que Ecuador posee.
A decir del mandatario, los aviones que en los meses venideros se incorporen a la flota aérea ecuatoriana serán útiles mientras se logra la compra de aeronaves nuevas.
De hecho, la Secretaría Nacional de Planificación (Senplades) efectuó un estudio en el que señala que Ecuador requeriría unos US$1.200 millones para comprar entre 12 y 14 aviones supersónicos nuevos. Desde ya la fuerza aérea ecuatoriana miran cin buenos ojos al Sukhoi, por tener en las cercanias una planta de mantenimiento radicada en un país aliado del ALBA, Bolivia, quien ya anuncio dicha construcción en la ciudad de Cochabamba.
El ministro de Defensa ha dicho que por el momento no es posible financiar un gasto de esa magnitud, pero ha reiterado que en el futuro proximo se deberá considerar una adquisición de ese tipo.

¿QUE ESTÁ DETRAS?
"Ecuador lo que necesita es mantener en los niveles mínimos necesarios sus Fuerzas Armadas. Nosotros no vamos a entrar en ninguna carrera armamentista ni hacer inversiones desproporcionadas", ha señalado el ministro de Seguridad de Ecuador, Miguel Carvajal.
El coordinador del Área de Relaciones Internacionales de la Universidad San Francisco de Quito, Carlos Espinosa,  dijo que las recientes negociaciones de armamento por parte de Ecuador se tratan, en parte, de una modernización del arsenal militar que no ha sido renovado en muchos años. Pero añadió que también hay que ver esas compras en el contexto del nivel de tensión que ha existido entre Ecuador y Colombia en los últimos meses, y la "lección" que Ecuador sacó del ataque colombiano a una base de la guerrilla de las FARC en territorio fronterizo ecuatoriano, el 1 de marzo de 2008. "Ecuador se dio cuenta de que era necesario reforzar sus Fuerzas Armadas para tener capacidad de disuasión frente a Colombia y para mantener control en sus fronteras frente a los grupos irregulares", sostuvo Espinosa.
El presidente Correa ha manifestado en el pasado que parte del nuevo armamento, como los aviones que se negocian con Brasil, estará destinado a "vigilar nuestra frontera norte".
Más allá de ello, el pasado miércoles, el ministro Carvajal dijo que "no hay escenarios de guerra con Colombia", y resaltó el que "el ambiente de trabajo de normalización (de las relaciones diplomáticas con dicho país) es absolutamente positivo".
Ecuador rompió relaciones con Colombia a raíz del ataque militar colombiano de marzo de 2008, pero los cancilleres de ambos países han iniciado diálogos para restablecer los nexos.

MENSAJE "CONTRADICTORIO"
La compra de armas por parte de Ecuador y varios países de la región como Venezuela, Brasil y Colombia ha sido vista por diversos analistas como una contradicción con el mensaje de paz regional que propugna la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
Carlos Estarellas, profesor de Derecho Internacional de la Universidad Católica de Guayaquil, señaló que detrás de las adquisiciones hay un afán armamentista que se despliega por América Latina "y que no hace sino generar más pobreza".
El analista considera que en la Unasur, cuya presidencia pro témpore la posee Ecuador, "se debe entender que el incremento de los gastos militares no va a conseguir ningún tipo de integración, sino que será un factor de peligro frente a las diversas discrepancias que se mantienen en la región". Estarellas dijo ver con preocupación las negociaciones de armamento hechas por Ecuador, "un país que no tiene como característica el ser un poder militar, y que tiene muchas necesidades sociales por atender".
El experto calificó de "un error" la aceptación de aviones dados de baja por Venezuela. "Esos aviones no nos van a servir para nada. Es difícil pensar que miembros de la aviación ecuatoriana entrenen en aviones tan viejos y obsoletos", manifestó.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ha negado que el acuerdo para recibir la donación de Venezuela significara un "pacto militar" entre los dos países, añadiendo que "si Colombia, Estados Unidos o Israel me regalan seis Mirage, se los acepto encantado".

Bolivia adquiere seis cazas chinos K-8 por $57.8 millones de dólares


El Gobierno de Evo Morales aprobó el decreto 0310 que autoriza al desembolso de 57,8 millones de dólares para la compra directa -sin licitación- de seis cazas de combate ligeros K-8 de fabricación china, insumos para esas aeronaves y la capacitación de pilotos.
La norma ejecutiva, publicada en la Gaceta Oficial de Bolivia, especifica que los cazas K-8 serán "un aporte a la lucha regional contra el narcotráfico" y asegurarán "un debido control del espacio aéreo en zonas sensibles y afectadas por esa problemática".
Las aeronaves también sirven para entrenamiento. En los últimos años, países asiáticos y africanos compraron los aparatos de combate. En Sudamérica, Venezuela adquirió este año 18 cazas K-8.

Inicialmente, Bolivia debía comprar seis aviones de combate L-159, fabricados en la República Checa, pero la operación no pudo culminarse al rechazar el Gobierno Estados Unidos conceder su autorización, obligatoria por contar las aeronaves con importantes componentes de tecnología norteamericano.
El K-8 Karakorum (la letra K es la inicial de Karakorum, cordillera que separa a Pakistán y China) es un proyecto conjunto entre las empresas China Nanchang Aircraft Manufacturing Company (CNAMC) y Pakistan Aeronautical Complex (PAC). Es un entrenador avanzado con capacidades de ataque ligero con un MTOW de 4 toneladas. Está equipado con motorización china o estadounidense y asientos eyectables Martin-Baker de origen estadounidense. Su primer vuelo tuvo lugar en 1990. Sus principales usuarios son China, Pakistán y Egipto, junto a varias naciones predominantemente africanas que lo emplean en menores números.
Con ese monto, además, el Ministerio de Defensa de Bolivia adquirirá de su proveedor chino dos motores de repuesto para los aviones K-8, un simulador de vuelo, un sistema de vehículo de prueba KTS-2000 BM, un sistema de instructor interactivo multimedia (IMI), repuestos, herramientas y equipamientos.
Asimismo, se contrata el entrenamiento de personal de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB), los manuales técnicos, reensamblaje y servicios de asistencia técnica, flete y seguro de transporte de esos bienes hasta el país.
 
EL GOBIERNO NO HABLA
El ministro de Defensa, Walker San Miguel, no quiso dar detalles de la adquisición de las aeronaves de guerra ni del decreto 0310, porque el presidente Morales hablará de ambos puntos el 10 de octubre, día aniversario de la FAB.
Pero en el mismo decreto se detalla que la autorización otorgada por el Ejecutivo es para el Ministerio de Economía y Finanzas, que, a través del Tesoro General de la Nación (TGN), debe transferir "un monto equivalente a 57.800.000 millones dólares". "Para la gestión 2009, el Ministerio de Finanzas transferirá al de Defensa la suma equivalente hasta 11.000.000 de dólares con cargo al Presupuesto General 2009".
Además, Defensa deberá "incorporar en su presupuesto institucional correspondiente a las gestiones 2010, 2011 y 2012 la inscripción de los recursos necesarios para el pago por la compra de los bienes" antes mencionados.

COLOMBIA SUSPENDE COMPRA DE MECANIZADOS POR DEUDA DE BONOS A PERSONAL DE LAS FFAA


El Gobierno de Colombia aplazó una compra de carros de combate calculada en 28 millones de dólares para destinar este dinero a una bonificación especial destinada a 22.000 soldados profesionales que la dejaron de recibir hace dos meses por falta de presupuesto y vacíos legales.

Ante el retraso en el pago de la bonificación, cientos de efectivos del Ejército de Tierra y de la Infantería de Marina amenazaron con renunciar, lo que hubiera colocado en riesgo la ofensiva del Gobierno contra las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), según explicaron fuentes oficiales.
El ministro de Defensa, Gabriel Silva, dijo que para el Gobierno es prioritario el bienestar de los efectivos de las Fuerzas Militares que mantienen una ofensiva contra la guerrilla izquierdista, otros grupos armados ilegales y el narcotráfico.
"Los recursos necesarios para darle continuidad a este subsidio procederán, primordialmente, según lo dispuesto por el Ministerio de Defensa, del aplazamiento en la adquisición de tanques de guerra", aseguró el funcionario.
"Con esta decisión, se ratifica la política de darle prioridad al bienestar de los soldados y de sus familias, sobre otras prioridades", explicó.
Silva aclaró que la compra de los tanques  no se suspenderá y que pese al aplazamiento se buscarán los recursos para una futura adquisición destinada a garantizar la seguridad interna del país y no a una carrera armamentista.
"Esto es un aplazamiento que corresponde a las prioridades y a la doctrina que tenemos, pero no quiere decir que renunciamos a la estrategia y a la política de abandonar nuestras capacidades disuasivas dentro de los límites más estrictos y rigurosos de Colombia, que a diferencia de otros países no hace parte de la carrera armamentista", aseguró.
Las Fuerzas Armadas de Colombia cuentan en la actualidad con más de 438.000 efectivos, la mayoría incorporada al Ejército que persigue a la guerrilla en apartadas zonas montañosas y selváticas y a la Policía Nacional, encargada de garantizar la seguridad en las ciudades.
El Gobierno colombiano lleva varios años buscando una refuerzo de sus unidades pesadas, especialmente después de que Venezuela  haya anunciado importantes adquisiciones en este sentido como.
Sin embargo, por diversas razones, se han ido descartando las distintas ofertas entre las que, se conoce, existió una de España que ofreció los carros de combate AMX-30 que ha desactivado al recibir los más modernos Leopard 2E.

BOLIVIA: AUN ESPERA DONACION DE 5 UH-1H


El presidente boliviano, Evo Morales, resaltó que todavía no han recibido la donación de cinco helicópteros militares anunciada hace más de cinco meses por Brasil para reforzar la lucha contra el narcotráfico, porque, dijo, falta el permiso de los Estados Unidos, dueño de la tecnología.

En declaraciones a la prensa internacional, Morales recordó que los helicópteros ofrecidos por Brasilia, modelo, han sido fabricados por empresas estadounidense y, por tanto, necesitan la autorización del Gobierno del presidente Barack Obama que, por el momento, no se ha pronunciado en ningún sentido.
Morales dijo que los aparatos tendrán la finalidad de vigilar la frontera con Brasil, que tiene alrededor de 3.100 kilómetros de longitud, los cuales, de acuerdo con informes oficiales, abarcan poblados fronterizos que son considerados puntos neurálgicos del comercio de cocaína.
Los helicópteros fueron ofrecidos en mayo pasado por el ministro brasileño de Defensa brasileño, Nelson Jobim, durante una visita oficial a La Paz. En esa ocasión, sin embargo, Jobim habló de cuatro unidades y no cinco como ahora señaló Morales.
Estados Unido prohibió este año la transferencia de unos cazas de combate fabricados por la República Checa y que quería Bolivia para mejor su Fuerzas Aérea pero que contaban con tecnología norteamericana. A pesar de las gestiones del gobierno Morales, al final se abandonó la operación y se decidió adquirir cazas construidos por la República Popular China.

TERRORISTAS ISLAMICOS SUBEN A FOROS EN WEB´S DE A.LATINA, COMO HACER Y DETONAR BOMBAS


Desde la llegada a Sud America de la arremetida de Irán y mas recientemente, Siria, con sus estrechas relaciones en Defensa con la Venezuela de Hugo Chávez y Bolivia es cada vez más frecuente encontrar por parte de grupos israelies de rastreo en la Web dedicados a monitorear actividadades sospechosas de caracter radical islamico y presentes en Sud America, instrucciónes y/o apologias de caracter evidentemente terroristas. 
La presencia de Hezbollah en Venezuela dejo de ser un mero rumor y es confirmada en los hechos concretos, como tambien su estrecha colaboración e interactividad con los servicios de inteligencia de Venezuela. Los iraníes también instalaron oficinas diplomáticas en el país las que usan para actividades de la “Fuerza Quds” que es el brazo de la Guardia Revolucionaria para Fuerzas Especiales que se forman como el grupo principal de seguridad en Irán desde la revolución de 1979 y son las encargadas de las operaciones tacticas del Hezbollah en el exterior.
En este caso "instructivos de como armar y detonar bombas de alto poder explosivo detonandolas con simples celulares o radios de dos vias", facilmente encontrables en el mercado, estan siendo bajadas por internautas en Sud América. Gracias a terroristas radicales islamicos.
La imagen incluida en este post arriba, dice:
"¿Quieres poner bombas utilizando teléfonos celulares o radios de dos vías? En el  foro Ansar te muestra cómo ..." por decir lo menos, INCREIBLE !!!
Hay dos videos explicativos, uno de un dispositivo de teléfono celular y el otro de un aparato de radio simple de dos vías.
Tanto los videos como las instrucciones escritas parecen ser "objetos encontrados en la Web" que han tenido la  marca de fábrica de Al-Qaida recientemente.
Aparecen dos vídeos con tres descargas, enlaces de envió a tres foros más. Todos probablemente la obra de una persona.

Argentina suspendió ejercicios militares usuales con Uruguay sin previo aviso.


La Fuerza Aérea Argentina canceló sin aviso previo ni explicaciones posteriores, maniobras habituales con su similar uruguaya, en un marco de constantes y crecientes roces diplomáticos, merced a un grupo de ecoterroristas financiados oscuramente, que desde hace cuatro años ocupan las cabeceras de los puentes binacionales entre Argentina y Uruguay -uno permanente ,otros en alta temporada- impidiendo totalmente el tránsito terrestre de mercaderías y personas entre ambos países.

Si ya algunas aeronaves militares uruguayas en tránsito a Chile o a la Antártida habían sido importunadas por los controladores aéreos argentinos, simulando desconocer planes de vuelo plenamente autorizados, ahora Argentina suspendió tanto ejercicios de reabastecimiento en vuelo, como el denominado Río, en el que se simula la intercepción fronteriza de vuelos ilegales de cara al narcotráfico.
Argentina no ha expuesto motivos por la clausura de estas actividades, aunque se especula que la proximidad de una definición por parte de la Corte Internacional de Justicia de La Haya del conflicto limítrofe, más la negativa de los grupos revoltosos a acatar un fallo contrario, si se diera, sumado a actitudes intervencionistas del embajador de ese país en Uruguay, Patiño Mayer, de quien la oposición reclama su expulsión, hayan exacerbado la tensión

GUARDIUM UGV LS ES PRESENTADO POR ISRAELI G-NIUS


G-NIUS Unmanned Ground Systems, una asociación entre las empresas israelitas Elbit Systems e IAI (Israeli Aerospace Industries), presentó una nueva configuración de su vehículo terrestre remotamente operado (UGV) Guardium, denominada LS, para tareas de apoyo logístico en el campo de batalla, transportando municiones, equipos de pequeñas dimensiones y víveres para las tropas. En la parte trasera existe de un espacio con capacidad para llevar hasta 1,2 ton. de carga. Derivado de la versión de vigilancia, está dotado con un inhibidor de artefactos explosivos de Elisra Electronic Systems, un sensor optrónico IAI Tamam MiniPOP, un GPS de navegación Immune, cámaras de observación, sistema de transmisión de datos e imágenes y dispositivos de detección y evasión de obstáculos

BRASIL: LA FAB RECIBE EL PRIMER EMBRAER 190


Embraer entregó oficialmente el primer birreactor de transporte Embraer 190 destinado al Gobierno de su país en la Base Aérea de Brasilia, configurado especialmente para cumplir misiones de la Presidencia de la República y operado por el Grupo de Transporte Especial (GTE) de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB). El contrato entre el fabricante y el Comando de la Aeronáutica (COMAER), firmado en junio de 2008, contempla una segunda aeronave del mismo modelo. La aeronave posee una amplia y confortable cabina, incluyendo espacio para reuniones y área para uso del residente. Cuenta con un sistema especial de comunicaciones seguras y capacidad para transportar a 54 personas, entre pasajeros y tripulación.
El alcance desde Brasilia, posibilita vuelos sin escala para cualquier destino en Sudamérica, ofreciendo gran flexibilidad operativa. Para garantizar el soporte y la adecuada disponibilidad estos aparatos, la FAB firmó un contrato de cinco años de duración sobre el programa Embraer Soluciones de Soporte para Gobiernos (ESSG), un paquete de apoyo logístico que abarca servicios de mantenimiento, soporte de material, mano de obra especializada de ingeniería y administración de reparaciones y garantías. La asociación entre el constructor y la Fuerza Aérea empezó hace cuarenta años y coincide con la propia creación de la empresa.
Actualmente la FAB opera diversos modelos de aviones de transporte como los ERJ-135, ERJ-145, Legacy 600, EMB-120 Brasilia, EMB-121Xingu y EMB-110 Bandeirante; de defensa Xavante, EMB-111 Bandeirante Patrulla, AMX, Tucano, Super Tucano; y sistemas de inteligencia, vigilancia y reconocimiento ISR (Intelligence, Surveillance and Reconnaissance) operados en el ámbito del Sistema de Vigilancia del Amazonas (SIVAM). La modernización de la flota de los cazabombarderos AMX y F-5, este último de fabricación original norteamericana, también están en el área de actividades desarrolladas actualmente por Embraer para a atender a las necesidades de la FAB.

ECUADOR COMPRARA 12 MIRAGE CHEETAH


Unos doce Dassault/Denel Mirage Cheetah C serán incorporados por la FAE próximamente, si bien no se descartan aún oficialmente las ofertas chilena por Mirage Pantera y española de Mirage F1, por razones de costo y de proximidad con el Kfir CE, su principal vector de combate, en momentos de malas relaciones con Israel, su proveedor, y de acercamiento del Gobierno de Ecuador a Irán y otros países islámicos radicales. Adicionalmente, se evalúa la cesión de seis Mirage 50EV/DV venezolanos que se están dando de baja, tras años de intenso uso. Los Cheetah, que Sudáfrica dejó de usar al recibir el Gripen, fueron analizados sin éxito en el pasado, junto a los Kfir C-10 (estos mejor apreciados), por la Fuerza Aérea Brasileña como aviones de transición, en el caso de prolongarse más allá de 2010 la llegada de sus nuevos cazas

BRASIL DETIENE INGRESO DE VENEZUELA AL MERCOSUR POR CARACTER AUTORITARIO DE REGIMEN CHAVISTA



La Comisión de Relaciones Exteriores del Senado brasileño aplazó por 30 días la votación del protocolo de ahesión de Venezuela al Mercosur, luego de que el relator del caso, el senador Tasso Jereissati, recomendara su rechazo por el "carácter autoritario" del Gobierno de Hugo Chávez. Por su parte, el Gobierno paraguayo aguardará la aprobación parlamentaria brasileña, para volver a tramitar el año próximo ante el Senado la adhesión de ese país al bloque regional.
El canciller paraguayo, Héctor Lacognata explicó que no tendría sentido insistir por la adhesión venezolana si el Senado brasileño la veta, ya que se requiere de un consenso para que el país caribeño sea socio pleno del pacto, luego de que el protocolo fuera aprobado anteriormente en los parlamentos de Argentina y Uruguay.
"No está planteado, al menos por este año, la presentación al Congreso del tema de Venezuela. Veremos el año que viene", señaló Lacognata, al recordar que se vieron obligados a retirar la propuesta del Senado, de mayoría opositora, "porque no existían los votos" para su aprobación.
La Comisión de Relaciones Exteriores del Senado brasileño decidieron aplazar la votación después de que Jereissati, uno de los principales líderes de la oposición, leyera un informe en el que recomienda el veto al acuerdo que convierte a Venezuela en miembro pleno del bloque integrado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.
El aplazamiento fue aprobado inmediatamente después de que el portavoz del Gobierno en el Congreso, senador Romero Juca, anunciara su intención de presentar una recomendación alternativa a la del relator. En el informe en el que recomienda el rechazo al protocolo de adhesión de Venezuela al Mercosur, Jereissati alega que el Gobierno del país vecino no cumple diferentes exigencias para poder ingresar al bloque.
Según el senador opositor, el principal motivo de su voto en contra es el "escenario de violación a las libertades democráticas" en Venezuela. El legislador citó casos como el cierre de medios de comunicación en Venezuela y el uso de milicias armadas para reprimir las manifestaciones de la oposición, y cuestionó la legitimidad de los procesos electorales venezolanos.
El Protocolo de Adhesión de Venezuela al Mercosur fue aprobado por los Gobiernos de Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay en julio del 2006, pero hasta ahora sólo ha sido refrendado por los congresos argentino y uruguayo. De ser aprobado por la Comisión de Relaciones Exteriores, el protocolo pasará al pleno del Senado de Brasil para una última votación, ya que la Cámara de Diputados ya lo refrendó, pero un rechazo en la Comisión hundiría definitivamente el proyecto.

IRÁN EN APUROS: RIESGOS PARA LA ESTABILIDAD REGIONAL

Las elecciones presidenciales celebradas en Irán el pasado junio han ahondado las brechas que ya existían en la sociedad iraní y entre su clase dirigente. La recomposición de fuerzas puede tener consecuencias importantes para la política exterior del Irán y para la estabilidad de Oriente Medio

Irán es un Estado pivote que cuenta con una gran importancia estratégica en la confluencia del Golfo Pérsico, Oriente Medio, Asia Central y el Mar Caspio. Lo que ocurre en Irán no puede dejar indiferente a ninguno de sus vecinos. La conflictiva situación interna creada tras las elecciones presidenciales de junio, de dudosa legitimidad, podría llevar a los actuales dirigentes iraníes a tratar de recomponer el frente interno mediante la negociación y algunas concesiones. Otra posibilidad es que el ala dura, vencedora en las elecciones, recurra a la vieja táctica de culpar al exterior de su crisis interna. Aún está por ver si esos mismos dirigentes caerían en la tentación de provocar alguna crisis con el exterior para justificar su política de mano dura y tratar de cerrar filas en torno a su liderazgo frente a una amenaza que venga de fuera, o si, por el contrario, prevalecerá un cálculo pragmático por el cual el régimen considere un mal menor negociar con EEUU un “gran acuerdo” que contemple los intereses nacionales iraníes y el interés del régimen en preservar el sistema político actual.
Desde hace 30 años, Irán vive sumido en un dilema existencial: mantenerse fiel a la naturaleza teocrática de la República Islámica creada por el ayatolá Jomeini o permitir que el sistema de gobierno sea aquel que elijan sus ciudadanos a través de elecciones democráticas. Durante ese tiempo, han tenido lugar en el país casi una treintena de procesos electorales a distintos niveles. En ellos se combinaron los elementos teocráticos prevalecientes en el sistema con ciertas prácticas democráticas. Algunos resultados electorales fueron inesperados, pero nunca se puso en peligro ni se cuestionó seriamente el modelo surgido de la revolución islámica. Nunca, hasta las elecciones presidenciales del pasado 12 de junio. Los resultados oficiales que daban la victoria al candidato ultraconservador Mahmud Ahmadineyad, con el 63% de votos a favor, han despertado grandes sospechas de fraude en todo mundo, sobre todo debido a la reacción de importantes sectores de la sociedad iraní que no han dejado de mostrar su descontento con el proceso y con los resultados desde la misma noche electoral.

La amplia movilización social previa a las elecciones por parte de sectores favorables al cambio y el elevado índice de participación (cerca del 85%) presagiaban un resultado bien distinto, bien en forma de victoria del candidato moderado Hosein Musaví o, al menos, una segunda ronda entre los dos candidatos más votados. El líder supremo, Ali Jamenei, tomó la decisión arriesgada de romper con su papel de árbitro y decantarse abiertamente a favor de Ahmadineyad, a quien felicitó por su victoria incluso antes de darse a conocer los resultados oficiales, al tiempo que se mostraba cada vez más amenazante con quienes denunciaban el fraude. El tiempo dirá si las elecciones de junio de 2009 fueron el comienzo del fin de la República Islámica tal como la concibió el ayatolá Jomeini. Lo que sí queda claro es que dichas elecciones han supuesto un antes y un después en la historia moderna de Irán y han ahondado dos brechas que ya existían: una entre los grupos sociales reaccionarios y los aperturistas, y otra –tan importante o más que la anterior– entre los sectores ultraconservadores del régimen y los más pragmáticos. Esos enfrentamientos marcarán el futuro inmediato de Irán y de sus relaciones con el exterior.

Es de esperar que el nuevo gobierno de Ahmadineyad se vea debilitado en el frente interno a raíz de su pérdida relativa de legitimidad, teniendo que emplearse a fondo para imponerse a sus rivales dentro del régimen y a los movimientos sociales de oposición. A nivel internacional, semejante debilitamiento podría llevar al país por dos caminos distintos y prácticamente excluyentes: un mayor aislamiento que le generaría una inseguridad creciente al régimen, lo que podría tornarlo más agresivo buscando conflictos en el exterior o, por el contrario, la prevalencia de un cálculo pragmático por el cual el ala dura del régimen considere un mal menor negociar con EEUU un “gran acuerdo” que contemple los intereses nacionales iraníes y el interés del régimen en preservar el sistema político actual.

Inestabilidad iraní, inestabilidad regional
Irán es un Estado pivote que cuenta con una gran importancia estratégica en la confluencia del Golfo Pérsico, Oriente Próximo, Asia Central y el Mar Caspio. Lo que ocurre en Irán no puede dejar indiferente a ninguno de sus vecinos. Si algo se ha demostrado en tiempos modernos es que la sociedad iraní tiende a movilizarse contra sus dirigentes y que el poder político puede ser menos sólido de lo que aparenta. Los sucesivos dirigentes iraníes, tanto monarcas como mulás, han considerado que el papel natural que le corresponde a su país es el de hegemón regional, debido a su ubicación geográfica, el peso de su población, su riqueza en recursos naturales y su pasado imperial que lo diferencia del resto de sus vecinos. Las aspiraciones hegemónicas no se limitan a las elites políticas, sino que se extienden a lo largo y ancho de una sociedad profundamente nacionalista y que se ve a sí misma como la heredera del esplendor civilizacional de siglos pasados. A eso contribuye que sea un país persa y de población mayoritaria chií, rodeado de países que no lo son y con los que ha tenido relaciones conflictivas a lo largo de la historia. Aun así, el sentimiento de orgullo nacional, e incluso de superioridad en relación con sus vecinos, difícilmente explicaría por sí sólo la forma en que Irán se relaciona con éstos.
Tan importante como el extendido orgullo nacional de muchos iraníes es la constante sensación de inseguridad en la que vive el país –en parte debido a las invasiones e injerencias externas que ha sufrido a lo largo de su historia– y de sospecha de las intenciones de los demás. Como resultado de ello, la política exterior del Irán contemporáneo resulta una mezcla de grandes proyectos de transformación regional y continuos recordatorios de sus propias limitaciones. A pesar de las aspiraciones regionales iraníes y de la retórica revolucionaria y de “liberación de los pueblos oprimidos”, Irán no ha sido capaz de ganarse grandes apoyos en la región, y mucho menos de exportar su revolución islámica a países vecinos, aunque el temor a que eso ocurriera transformó a la región a partir de los años 80. De hecho, durante las tres últimas décadas, Irán ha sido un país considerablemente solitario en términos estratégicos y ha carecido de aliados sólidos y duraderos en su entorno –aunque este hecho se ha visto alterado con el surgimiento de un poderoso bloque chií en el vecino Iraq tras la ocupación del país liderada por EEUU–. Algunas alianzas regionales, como la que Irán mantiene con Siria y Hamás, tienen un carácter coyuntural y se basan en la necesidad de darse apoyo mutuo frente a unos temores compartidos y no en una visión conjunta de sus realidades nacionales y regionales.
Desde el triunfo de la revolución islámica en 1979, los dirigentes iraníes han tratado de buscar un equilibrio entre la visión revolucionaria de Jomeini, centrada en la lucha entre el bien y el mal, y un enfoque pragmático de las relaciones internacionales basado en cálculos políticos y la defensa de los intereses nacionales. Con frecuencia, la búsqueda de ese equilibrio ha producido contradicciones e incoherencias en la política exterior iraní. En ese sentido, la ideología de Jomeini venía a reforzar las aspiraciones nacionalistas de Irán y su papel como modelo exportable al resto del mundo musulmán, empezando por los países árabes vecinos.

Obama, Irán y las dificultades del momento
Uno de los principales beneficiarios de las temerarias políticas de la Administración de George W. Bush en el Golfo Pérsico ha sido, sin duda, Irán. El auge del poder regional de Teherán tras la eliminación del contrapeso iraquí, demostrado mediante su capacidad de proyectar su influencia más allá de sus fronteras (en Iraq, Líbano, Palestina y entre las opiniones públicas de los países vecinos), es un legado de la estrategia neoconservadora cuyas consecuencias completas todavía están por ver. La poco envidiable herencia a la que se tiene que enfrentar la política exterior de la Administración de Barack Obama en Oriente Medio hace necesario que EEUU busque nuevas formas de relacionarse con los principales actores con capacidad de aliviar o complicar los problemas a los que se enfrenta Washington, y al mismo tiempo preservar los intereses estratégicos estadounidenses en la región. La cerrazón ideológica y la retórica de cambio de régimen empleada por la anterior Administración –tan polarizadora como incapaz de alcanzar sus objetivos– ha dado paso a un nuevo enfoque más pragmático, en el que se trata de dar con un tono en las relaciones que no recuerde a un duelo de vaqueros en el Lejano Oeste ni a un regateo entre mercaderes en un bazar.
En una muestra de querer distanciarse de las políticas de su predecesor, el presidente Obama ha expresado su voluntad de entablar un diálogo con los dirigentes iraníes a partir de los intereses comunes que sus dos países tienen en la región (garantizar la estabilidad de Iraq, luchar contra los talibán en Afganistán y contra al-Qaeda en toda la región, contener la inestabilidad interna de Pakistán, luchar contra el narcotráfico, etc.). Obama también ha llevado su campaña de diplomacia pública al frente iraní, con gestos como enviar un mensaje de felicitación al pueblo iraní con motivo del año nuevo persa, así como plantear la necesidad de que haya un respeto mutuo en las negociaciones que tengan lugar entre los dos países. En Irán, como en la mayor parte del mundo, la llegada de Obama a la Casa Blanca ha sido vista por algunos como una esperanza de cambio y de distensión en las relaciones internacionales. A eso contribuye el hecho de que la sociedad iraní es, con toda probabilidad, la menos antiestadounidense de toda la región (a modo de anécdota, u-ba-ma en persa significa “está con nosotros”). Durante la campaña electoral previa a las presidenciales de junio, la política exterior fue uno de los temas importantes en los debates. Los candidatos que competían contra Ahmadineyad cuestionaron su estilo confrontacional de gestionar las relaciones internacionales del país, incluidas las negociaciones en torno al dossier nuclear, así como su fijación en negar el holocausto.
En un momento en que la nueva Casa Blanca muestra en público su voluntad de negociar con Teherán –e incluso se invita a diplomáticos iraníes a las celebraciones del 4 de julio–, el ala dura del régimen, encabezada por el líder supremo, debió considerar que cualquier resultado que no fuera una victoria contundente de su candidato Ahmadineyad en la primera ronda electoral podría abrir el camino a una nueva dinámica entre Washington y Teherán de consecuencias imprevisibles, sobre todo si ellos no ejercían un control total sobre el proceso por parte iraní. En su afán por acaparar los resortes del poder, quienes se consideran custodios del espíritu de la revolución –Jamenei, Ahmadineyad, la guardia revolucionaria, las milicias basiyis– han hecho una apuesta muy fuerte al marginar a otros sectores del régimen, incluidos antiguos presidentes como Rafsanyani y Jatami, así como a parte del establishment clerical chií que no ha respaldado de forma unánime el resultado electoral. Tal vez el anciano líder supremo haya decidido ligar su futuro al de Ahmadineyad convencido de que cualquier cambio en el sistema podría cuestionar su permanencia al frente del mismo, bien por las demandas sociales de que el suyo también sea un cargo electo, bien por su posible –aunque difícil– sustitución por otro ayatolá más ultra. Seguramente los acontecimientos recientes estén determinando la suerte de los posibles sucesores de Jamenei.
La situación interna creada tras las elecciones en Irán no tiene visos de facilitar el diálogo irano-estadounidense, ya difícil desde hace tiempo, pues muchos defensores de Ahmadineyad siguen desconfiando de las intenciones de Washington, más allá del deseo de cambio de rumbo expresado por Obama desde el comienzo de su mandato y en su histórico discurso a los musulmanes pronunciado en El Cairo el pasado 4 de junio. Aun así, la reacción de la Casa Blanca ante las denuncias de fraude en las elecciones iraníes, mostrando su preocupación por la represión policial pero evitando sonoras declaraciones de condena, han debido desconcertar a la vieja guardia de Teherán, acostumbrada durante los últimos 30 años a ser el blanco de las condenas estadounidenses, aunque éstas no consiguieran cambiar la realidad sobre el terreno. Prueba del actual tanteo diplomático entre los dos países es que las autoridades iraníes no han lanzado una campaña virulenta contra EEUU, como cabría esperar, culpándolo de estar detrás de las manifestaciones y disturbios ocurridos tras las polémicas elecciones. En el contexto de inestabilidad interna, el poder iraní prefirió centrar su campaña contra el “enemigo externo” en otros países europeos, además de Israel. El Reino Unido se convirtió en el objetivo preferido por los ultras iraníes para lanzar todo tipo de acusaciones de injerencia, espionaje y desestabilización, con el fin de convertirlo en el nuevo “gran Satán”. Este giro tendría como objetivo no cerrar las puertas al diálogo con EEUU.
Como es común en regímenes no democráticos –y, en ocasiones, también en algunos democráticos– la búsqueda de enemigos fuera de las fronteras propias se convierte en una prioridad para unos dirigentes que quieren justificar sus políticas y deslegitimar a sus opositores acusándolos de ser desleales o incluso traidores a la patria. La pregunta que ahora está en mente de muchos estrategas es si los actuales dirigentes iraníes, que han roto las reglas del juego al autoproclamarse vencedores en unas elecciones de dudosa legitimidad, tratarán de recomponer el frente interno mediante la negociación y algunas concesiones o, por el contrario, recurrirán a la vieja táctica de culpar al exterior de su crisis interna. Algunos van más allá y se cuestionan si esos mismos dirigentes caerían en la tentación de provocar alguna crisis con el exterior para justificar su política de mano dura y tratar de cerrar filas en torno a su liderazgo frente a una amenaza que venga de fuera. Ninguno de los escenarios anteriores es descartable. Un elemento que hace difícil prever el curso de los acontecimientos es el debilitamiento del régimen y las crecientes brechas tanto en su interior como en la sociedad.

Posibles consecuencias en Oriente Medio
La nueva configuración de fuerzas en Irán puede tener consecuencias para la situación regional y para los intereses de EEUU y de sus aliados. Una de esas consecuencias podría ser que los aliados regionales de Irán (Siria, Hezbolá en Líbano y Hamás en los territorios palestinos) consideren que sus alianzas se vuelven más complejas si se dan muestras de debilidad interna en Irán. Estos actores regionales podrían estar interesados en diversificar sus contactos y apoyos en el exterior con el fin de proteger sus intereses, por lo que estarían dispuestos a mostrar cierta flexibilidad si se dan las condiciones necesarias. El anuncio hecho por la Casa Blanca del nombramiento de un nuevo embajador estadounidense en Damasco tras cuatro años de ausencia –anuncio que coincidió con la polémica electoral en Irán– podría llevar al régimen sirio a plantearse la conveniencia de reevaluar su alianza con Teherán con el fin de defender sus intereses nacionales a través de nuevos alineamientos regionales e internacionales. Las intensas gestiones diplomáticas realizadas con Siria en los últimos tiempos por parte de distintos países, incluidos algunos europeos, serían un indicador en ese sentido.
Conviene recordar que, cuando existía el régimen de Saddam Husein, tanto Irán como Siria compartían una profunda hostilidad hacia su vecino común, independientemente del carácter teocrático del régimen iraní y laico del régimen sirio. La invasión de Iraq en 2003 tuvo como resultado el fortalecimiento de las fuerzas religiosas dentro del país, especialmente las chiíes. Este hecho, apoyado abiertamente por Irán, preocupa mucho a los vecinos árabes, incluido Siria. Durante los últimos años, a Siria le ha interesado mantener cierto grado de inestabilidad dentro de Iraq, apoyando a la insurgencia suní, con el fin de disuadir a EEUU de seguir adelante con sus proyectos de cambio de régimen en la región. También a Irán le interesaba crear algunas dificultades a la presencia estadounidense en Iraq, al mismo tiempo que se veía beneficiado por el proceso político que daba más poder a sus aliados chiíes. La eliminación del régimen de Saddam Husein no ha significado necesariamente una coincidencia de los intereses estratégicos de Irán y Siria en el nuevo escenario regional. De hecho, es posible que el factor que más ha unido a Irán y Siria durante la actual década haya sido la política de la Administración Bush hacia Oriente Medio. Si actúa con habilidad, la Administración Obama podría cambiar algunos elementos de esa ecuación, en cuyo caso la UE debería asumir el papel de facilitador con algunas medidas que estén a su alcance (incentivos políticos y económicos, una posición más firme ante los desafíos y excesos del actual gobierno derechista israelí, etc.).
Las reacciones de los países árabes vecinos de Irán a la reelección de Ahmadineyad han sido comedidas en su mayoría, limitándose a felicitar al ganador y declarando que las protestas contra los resultados son una cuestión interna. De hecho, muchos en el mundo árabe contaban con su continuidad en el cargo, por lo que no se esperaban grandes cambios. Lo que sí genera preocupación es una posible desestabilización de Irán como consecuencia de las luchas de poder, y que esa desestabilización lleve a Irán a actuar de forma impredecible o provoque un enfrentamiento abierto con EEUU e Israel. A los regímenes árabes también les preocupa que la amplia movilización social en Irán tenga efectos contagiosos sobre sus propias sociedades en las que no faltan motivos para que surjan protestas colectivas. Las opiniones públicas árabes, por su parte, están divididas entre quienes apoyan al régimen iraní por sus posiciones desafiantes frente a lo que entienden como imposiciones occidentales y quienes recelan del aumento de la influencia iraní y chií en la región. En caso de plantear la situación actual en términos de enfrentamiento entre EEUU e Irán, es probable que las poblaciones árabes se decanten por Irán, al contrario que sus gobernantes.

Conclusiones

Implicaciones para España y la UE
Una victoria de Musaví en las recientes elecciones presidenciales habría sido un alivio para muchos observadores de las relaciones internacionales en Oriente Medio y el Golfo Pérsico, no tanto por el supuesto proyecto reformista de dicho candidato como por el mensaje que la cúpula del poder iraní transmitiría al resto del mundo al permitir su victoria. En ese sentido, la reelección de Ahmadineyad no es motivo para sentir ningún alivio y podría complicar los planes del presidente Obama para abrir una nueva etapa en la región.
Si los dirigentes iraníes apuestan por la continuidad de su política exterior de los últimos años –y de la retórica que la acompaña– sin responder positivamente a las ofertas de diálogo hechas por EEUU, existe una alta probabilidad de que las complicadas relaciones con Irán se deterioren aún más. Por el momento, la Casa Blanca se ha dado un margen hasta septiembre-octubre para poner a prueba las intenciones del gobierno iraní antes de reevaluar su estrategia. Es de prever que Teherán dé algún paso para explorar las posibles ventajas que le ofrezca Washington a cambio de alcanzar un acuerdo sobre su programa nuclear y otras cuestiones que afectan a la estabilidad de la región.
En caso de que Irán no responda a los llamamientos al diálogo, o lo haga con el claro objetivo de ganar tiempo sin querer alcanzar acuerdos, la Administración Obama se verá obligada a adoptar medidas más contundentes como la aprobación de la Ley de Sanciones al Petróleo Refinado de Irán (Iran Refined Petroleum Sanctions Act), lo que generaría nuevos enfrentamientos y una posible división de la comunidad internacional, con China y Rusia actuando una vez más como valedores de Irán. De producirse, esta nueva fase de enfrentamiento podría coincidir con la Presidencia española de la UE durante el primer semestre 2010, lo que condicionaría buena parte de su agenda internacional, pudiendo afectar a ámbitos como la política exterior de la UE, las relaciones transatlánticas y las relaciones euromediterráneas.
España ha mantenido tradicionalmente buena comunicación con la República Islámica de Irán, lo que debería dar fuerza a su capacidad mediadora, aunque también podría resultar imprescindible la adopción de posturas mucho más firmes frente a Irán y a Israel, en coordinación con otros socios, si la situación regional se deteriora aún más. En ese sentido, no conviene pasar por alto la advertencia hecha el pasado mayo por el rey Abdalá II de Jordania de que si no se alcanza antes un acuerdo de paz en Oriente Medio podría haber un nuevo conflicto bélico regional a lo largo de 2010.
A pesar de las críticas hechas a la Administración Obama por no haber empleado un tono más duro contra el régimen iraní después de las elecciones, lo más inteligente en estos momentos es que no parezca que se está produciendo una injerencia de Occidente en la política interna de Irán, aunque no deben cesar las muestras de apoyo a quienes reclaman más derechos y de solidaridad con los represaliados por el régimen. En la fase actual, un exceso de identificación por parte de otros países con los movimientos de protesta dentro de Irán es exactamente lo que más desearía el régimen en estos momentos.
Los procesos de transformación que están tomando forma en Irán llevarán su tiempo y sus resultados serán más satisfactorios para los reformistas iraníes cuanto menos ruido se haga desde fuera, y más apoyo se les dé sin causar grandes revuelos.

*Haizam Amirah Fernández es Investigador principal para el Mediterráneo y Mundo Árabe del Real Instituto Elcano y profesor de Estudios Árabes e Islámicos de la Universidad Autónoma de Madrid - Artículo publicado por el Real Instituto Elcano (ARI Nº 134/2009 - 23/09/2009)