El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas impuso el miércoles una cuarta ronda de sanciones contra Irán por su programa nuclear con el que potencias occidentales lo acusan de buscar fabricar armamento atómico.
El consejo de 15 naciones aprobó una resolución que es el resultado de cinco meses de negociaciones entre Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia, Alemania, China y Rusia.
Con 12 votos a favor, recibió el menor apoyo de las cuatro resoluciones de sanciones contra Irán que han sido adoptadas desde el 2006. Brasil y Turquía votaron en contra de la resolución y Líbano se abstuvo.
Las cuatro potencias occidentales del consejo habían buscado sanciones mucho más severas -algunas de ellas apuntando al sector energético de Irán- pero Pekín y Moscú trabajaron duro para suavizar las medidas propuestas en el documento de 10 páginas. "Este consejo ha estado a la altura de sus responsabilidades. Ahora Irán debe escoger un camino más prudente", dijo al consejo la embajadora estadounidense, Susan Rice, tras la votación.
La resolución llama a adoptar nuevas medidas en contra de bancos iraníes en el extranjero, en caso de sospechar su relación con programas de misiles o nucleares, así como también a la vigilancia por transacciones con cualquier banco iraní, incluyendo el banco central. Además expande un embargo de armas de la ONU en contra de Teherán y pone en una lista negra a tres entidades controladas por la Islamic Republic of Iran Shipping Lines y otras 15 compañías pertenecientes a los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica. La resolución también establece un régimen de inspección de carga similar a uno impuesto sobre Corea del Norte.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Robert Gates, expresó el martes que Estados individuales probablemente se moverán rápidamente para aprobar sus propias medidas que vayan más allá de las sanciones impuestas por la ONU. Además, existe una lista de 40 compañías a ser agregadas a una lista negra ya existente de Naciones Unidas de firmas cuyos activos alrededor del mundo serán congelados bajo sospecha de estar ayudando en los programas de misiles y nuclear de Teherán.
A continuación se detallan las nuevas sanciones contra Irán aprobadas el miércoles por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
* Estados miembros de la ONU ejercerán vigilancia sobre el banco central de Irán, así como también otros bancos iraníes, para evitar transacciones que contribuyan a la proliferación de actividades nucleares sensibles o el desarrollo de sistemas de envío de armamento atómico.
* Irán tiene prohibido adquirir un interés en cualquier actividad comercial en otro Estado que implique la extracción de uranio, la producción o uso de materiales nucleares y tecnología o tecnología relacionada con misiles balísticos capaces de enviar armas atómicas.
* Todos los estados deben evitar el suministro a Irán de tanques de batalla, vehículos blindados de combate, sistemas de artillería de grueso calibre, aviones de combate, helicópteros de ataque, buques de guerra, ciertos misiles o sistemas de misil o material relacionado, incluyendo repuestos.
* Irán tiene prohibido emprender cualquier actividad relacionada a misiles balísticos con capacidad de envío de armas atómicas, incluyendo lanzadores, y otros estados deben evitar la transferencia de tecnología o asistencia técnica a Irán en relación a tales actividades.
* Todos los estados deben evitar el ingreso en sus territorios de individuos que figuren en la lista negra de la ONU.
La nueva lista negra incluye sólo a un individuo: Javad Rahiqi, jefe de un centro nuclear iraní en donde es procesado el uranio. Sus activos también serán bloqueados y él enfrentará una prohibición internacional de viaje.
* Suma 15 entidades controladas por los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (IRGC, por su sigla en inglés) a una lista negra de la ONU preexistente de firmas cuyos activos en el exterior son mantenidos congelados y llama a todos los estados a ejercer vigilancia sobre las transacciones relacionadas con los IRGC que podrían contribuir a las actividades nucleares de Irán o el desarrollo de sistemas de envío de armas atómicas.
* Todos los estados deben revisar los cargamentos desde y hacia Irán si tienen razones para creer que contienen elementos prohibidos. Los estados deben confiscar y deshacerse de tales elementos.
* Los estados deben evitar el suministro de servicios financieros, incluyendo seguros y renovación de seguros, si tienen razones para creer que tales servicios podrían contribuir a la proliferación de actividades nucleares de Irán o el desarrollo de sistemas de envío de armamento nuclear.
* Los estados deben prohibir en sus territorios la apertura de nuevas sucursales, filiales u oficinas de representación de bancos iraníes y también prohibir que bancos de la república islámica inicien nuevas empresas conjuntas adoptando un interés de propiedad o estableciendo o manteniendo relaciones correspondientes con bancos en su jurisdicción para evitar la prohibición de servicios financieros, si creen que esas actividades podrían contribuir a las actividades de proliferación nuclear de Irán o al desarrollo de sistemas de envío de armas atómicas.
Los estados también deben prohibir que instituciones financieras bajo su jurisdicción abran oficinas de representación, filiales o cuentas bancarias en Irán bajo los mismos argumentos.