"Como parte de la cooperación de EE.UU. y Colombia por la lucha contra el narcotráfico se han instalado en los últimos años cinco radares. Eran estadounidenses y lo que sucede hoy es que pasan formalmente a ser propiedad de Colombia", explicaron fuentes del Ministerio de Defensa.
El embajador de Estados Unidos en Colombia, William Brownfield, entregó la propiedad de los equipos al ministro de Defensa, Gabriel Silva, en una ceremonia celebrada en el municipio de Tres Esquinas, en el selvático departamento de Caquetá.
Los aparatos de rastreo, modelo PS70, están ubicados en Riohacha (norte), San José del Guaviare (sureste), Marandúa (este), Tres Esquinas (Sur) y San Andrés (norte).
La transferencia de los radares coincide con el 20 aniversario del acuerdo de cooperación militar entre Washington y Bogotá, que fue suscrito en febrero de 1989 para controlar el espacio aéreo en la lucha contra el narcotráfico. Los equipos de rastreo "serán operados por personal de la Fuerza Aérea Colombiana que ha sido entrenado durante los últimos cuatro años", añadió la fuente.
Irán capturó un número de radares iraquíes durante la guerra de 1980-1988, y ahora fabrica una versión de ingeniería inversa para llevar a bordo de un camión, como se muestra en la foto de mas abajo.
Puede ser usado para monitorear aviones en vuelo rasante y helicópteros, es lo suficientemente sensible para detectar vehículos de tierra en óptimas condiciones. Y posee un rango de sensibilidad que le hace detectar de avionetas a una altura mínima de 25 mtrs.
Lo que lo hace ideal en la lucha contra el narcotrafico y el abastecimiento del mercado negro de armas a los grupos terroristas que operan en la zona.