El atentado de este miércoles en el que grupos terroristas demostraron su capacidad letal al derribar un helicóptero y matar a dos oficiales del Ejército y un soldado ha desatado una serie de críticas al Gobierno de Perú por su tratamiento del problema terrorista.
El piloto y el copiloto de un helicóptero de la Fuerza Aérea Peruana (FAP), así como un mecánico armero, murieron este miércoles luego de que su aeronave fue derribada cuando se disponían a socorrer a tres militares heridos en otro ataque registrado el martes, según un comunicado del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (CCFFAA)
Asimismo, otro oficial sufrió fracturas y cuatro soldados más resultaron graves. El rescate de estos heridos y los anteriores aún no ha concluido. Este es el tercer atentado en solo tres días, y cierra de momento una sangrienta serie que comenzó el pasado 1 de agosto, cuando tres policías y dos civiles (emparentadas con los agentes) murieron en otro ataque terrorista. Sumándose a 14 efectivos del EP asesinados anteriormente por los insurgentes
El ministro de Defensa de Perú, Rafael Rey, quien informó del derribo del helicóptero y reportó sólo dos militares muertos, se presento ayer ante el Congreso para informar sobre el incidente. El Gobierno suele calificar a los grupos que operan en el Valle de los Ríos Apurimac y Ene (VRAE), en la confluencia de los departamentos de Ayacucho y Junín, como "remanentes" de Sendero Luminoso aliados al "narco-terrorismo", minimizando su gravedad.
Las críticas a la estrategia antiterrorista procedieron incluso de voces del propio Ejecutivo. Así, el vicepresidente Luis Giampietri, vicealmirante de la Marina en retiro, agregó que "lo que se está viendo (en el VRAE) es un cúmulo de errores", en alusión al presupuesto destinado a contrarrestar el terrorismo.
El congresista Edgar Núñez, presidente de la Comisión de Defensa, no dudó en sugerir al Gobierno que solicite ayuda extranjera para hacer frente al terrorismo, tanto en hombres y armamento como en capacitación, ¿veremos personal militar y equipos de EEUU en bases peruanas?, en declaraciones que dio a la radio Cadena Peruana de Noticias (CPN).
El ex primer ministro Yehude Simon, quien encabezaba el Ejecutivo hasta hace un mes y medio, achacó lo sucedido a una visión "exclusivamente económica" porque, dijo, Perú no tiene "la economía suficiente para poner en práctica un plan (antiterrorista)". El pasado mayo, Simon, entonces primer ministro, dijo que su Gobierno había invertido 126 millones de dólares en el VRAE en equipamiento a las Fuerzas Armadas, de los que dos terceras partes fueron a equipamiento militar y policial, y ahora sostiene que el llamado "plan VRAE" ha sido abandonado.
En cuanto a Sendero Luminoso, reducido a dos centenares de militantes que operan en el VRAE y en zonas selváticas, nadie pone en duda que se ha aliado con grupos narcotraficantes, pero hay discrepancias sobre si se debe atribuir a la agrupación todos los ataques contra la policía y las Fuerzas Armadas.
Asimismo, otro oficial sufrió fracturas y cuatro soldados más resultaron graves. El rescate de estos heridos y los anteriores aún no ha concluido. Este es el tercer atentado en solo tres días, y cierra de momento una sangrienta serie que comenzó el pasado 1 de agosto, cuando tres policías y dos civiles (emparentadas con los agentes) murieron en otro ataque terrorista. Sumándose a 14 efectivos del EP asesinados anteriormente por los insurgentes
El ministro de Defensa de Perú, Rafael Rey, quien informó del derribo del helicóptero y reportó sólo dos militares muertos, se presento ayer ante el Congreso para informar sobre el incidente. El Gobierno suele calificar a los grupos que operan en el Valle de los Ríos Apurimac y Ene (VRAE), en la confluencia de los departamentos de Ayacucho y Junín, como "remanentes" de Sendero Luminoso aliados al "narco-terrorismo", minimizando su gravedad.
Las críticas a la estrategia antiterrorista procedieron incluso de voces del propio Ejecutivo. Así, el vicepresidente Luis Giampietri, vicealmirante de la Marina en retiro, agregó que "lo que se está viendo (en el VRAE) es un cúmulo de errores", en alusión al presupuesto destinado a contrarrestar el terrorismo.
El congresista Edgar Núñez, presidente de la Comisión de Defensa, no dudó en sugerir al Gobierno que solicite ayuda extranjera para hacer frente al terrorismo, tanto en hombres y armamento como en capacitación, ¿veremos personal militar y equipos de EEUU en bases peruanas?, en declaraciones que dio a la radio Cadena Peruana de Noticias (CPN).
El ex primer ministro Yehude Simon, quien encabezaba el Ejecutivo hasta hace un mes y medio, achacó lo sucedido a una visión "exclusivamente económica" porque, dijo, Perú no tiene "la economía suficiente para poner en práctica un plan (antiterrorista)". El pasado mayo, Simon, entonces primer ministro, dijo que su Gobierno había invertido 126 millones de dólares en el VRAE en equipamiento a las Fuerzas Armadas, de los que dos terceras partes fueron a equipamiento militar y policial, y ahora sostiene que el llamado "plan VRAE" ha sido abandonado.
En cuanto a Sendero Luminoso, reducido a dos centenares de militantes que operan en el VRAE y en zonas selváticas, nadie pone en duda que se ha aliado con grupos narcotraficantes, pero hay discrepancias sobre si se debe atribuir a la agrupación todos los ataques contra la policía y las Fuerzas Armadas.