Un comunicado de la Agencia de Noticias Nueva Colombia (ANNCOL), que sirve de conducto internacional para las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), propone abiertamente establecer un “bloque-político militar” con el gobierno de Hugo Chávez, para “defender a Venezuela” de las “bases militares gringas en Colombia”.
Un comunicado de la Agencia de Noticias Nueva Colombia (ANNCOL), que sirve de conducto internacional para las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), propone abiertamente establecer un “bloque-político militar” con el gobierno de Hugo Chávez, para “defender a Venezuela” de las “bases militares gringas en Colombia”.
Según el comunicado, publicado recientemente, esa organización narcoterrorista pretende “salvar a Venezuela”, porque de lo contrario, “se hundirá todo el proceso de emancipación latinoamericano”. La nota termina con el mismo lema que acostumbra a usar Chávez: “Patria, socialismo o muerte…¡venceremos!”.
Se trata de una nueva demostración de los estrechos vínculos que mantiene el mandatario venezolano con el narcoterrorismo colombiano; aunque ya el propio Chávez se encargó de mostrar su alianza con las FARC, guardando públicamente un minuto de silencio por la muerte del fallecido líder guerrillero, alias Raúl Reyes; y permitiendo una estatua del jefe de las FARC, Manuel Marulanda “Tirofijo”, en un barrio populoso de Caracas.
Por otra parte, los computadores incautados a Raúl Reyes en el marco de la Operación Fénix, realizada el 1 de marzo de 2008, registran los intercambios permanentes entre Chávez y los guerrilleros colombianos e, incluso, el apoyo financiero y logístico del gobierno venezolano a las actividades terroristas de las FARC.
La Unión de Organizaciones Democráticas de América, UnoAmérica, propuso a los miembros del Senado Federal del Brasil, considerar estos sensibles aspectos en la discusión que se llevará a cabo el próximo 11 de noviembre, con motivo de la posible incorporación de Venezuela al MERCOSUR.
Es evidente que el gobierno venezolano viola los más elementales preceptos de la democracia, por lo cual no cumple con los requisitos legales para entrar al MERCOSUR; pero además, de dar cabida a Chávez en ese bloque aduanero, también las FARC entrarán junto con él.
Ya el Brasil sufre suficientes embates del crimen organizado y del narcotráfico, como se evidencia diariamente en las favelas de Sao Paulo y de Río de Janeiro, para también tener que soportar el ingreso de un “bloque político-militar” conformado por Chávez y las FARC.
Según el comunicado, publicado recientemente, esa organización narcoterrorista pretende “salvar a Venezuela”, porque de lo contrario, “se hundirá todo el proceso de emancipación latinoamericano”. La nota termina con el mismo lema que acostumbra a usar Chávez: “Patria, socialismo o muerte…¡venceremos!”.
Se trata de una nueva demostración de los estrechos vínculos que mantiene el mandatario venezolano con el narcoterrorismo colombiano; aunque ya el propio Chávez se encargó de mostrar su alianza con las FARC, guardando públicamente un minuto de silencio por la muerte del fallecido líder guerrillero, alias Raúl Reyes; y permitiendo una estatua del jefe de las FARC, Manuel Marulanda “Tirofijo”, en un barrio populoso de Caracas.
Por otra parte, los computadores incautados a Raúl Reyes en el marco de la Operación Fénix, realizada el 1 de marzo de 2008, registran los intercambios permanentes entre Chávez y los guerrilleros colombianos e, incluso, el apoyo financiero y logístico del gobierno venezolano a las actividades terroristas de las FARC.
La Unión de Organizaciones Democráticas de América, UnoAmérica, propuso a los miembros del Senado Federal del Brasil, considerar estos sensibles aspectos en la discusión que se llevará a cabo el próximo 11 de noviembre, con motivo de la posible incorporación de Venezuela al MERCOSUR.
Es evidente que el gobierno venezolano viola los más elementales preceptos de la democracia, por lo cual no cumple con los requisitos legales para entrar al MERCOSUR; pero además, de dar cabida a Chávez en ese bloque aduanero, también las FARC entrarán junto con él.
Ya el Brasil sufre suficientes embates del crimen organizado y del narcotráfico, como se evidencia diariamente en las favelas de Sao Paulo y de Río de Janeiro, para también tener que soportar el ingreso de un “bloque político-militar” conformado por Chávez y las FARC.
No se sabe si la sensatez y la cordura serán los que prevalezcan en el plenario del próximo 11 de noviembre, donde el Senado decidirá probablemente postergar el ingreso de Venezuela al MERCOSUR hasta tanto no haya un cambio de gobierno.