La noticia podría resultar tan preocupante como significativa y quizás por ello las autoridades de Emiratos Árabes Unidos (EAU) intentaron desde un primer instante que el suceso se desvaneciera en medio de la confusión.
Autoridades locales llegaron a decir que los daños sufridos por el petrolero japonés M. Star, eran debidos a una ola gigante o una posible colisión con otro navío. Este viernes, sin embargo, un portavoz de la guardia costera de Emiratos confirmó a la agencia oficial de noticias que el navío había sufrido el pasado 28 de julio un "ataque terrorista" cuando navegaba por el estratégico estrechos de Ormuz.
"La investigación ha demostrado que el petrolero sufrió un ataque con explosivos artesanales cargados a bordo de una embarcación que se aproximó al navío", manifestó el uniformado.
El atentado contra el M. Star se produjo cuando navegaba a 22 kilómetros del puerto de Foujairah, uno de los siete pequeños enclaves que constituyen EAU, y se encontraba en alta mar. Pese al desmentido subsiguiente del gobierno emiratí, desde un primer instante la tripulación habló de una explosión que causó desperfectos no sólo en el casco del buque sino en las instalaciones internas y dejó un herido leve.
Al Qaeda, autor del ataque
El martes un grupo vinculado a la nebulosa de Al Qaeda, las Brigadas de Abdullah Azzam reivindicó la autoría de dicha acción. En su comunicado, las Brigadas acusaron a Emiratos de ocultar lo ocurrido para evitar un súbito aumento de los precios del petróleo y reconocieron que querían "dañar" la economía de lo que definieron como "el régimen global de infieles".
La misma organización dijo que la deflagración fue causada por un suicida "que se introdujo a bordo del petrolero" y que habían retrasado este anuncio para permitir que otros miembros del comando que participó en el asalto "pudieran retornar de forma segura a la base".
Aunque hay otra organización que utiliza el mismo nombre en Paquistán, las Brigadas de Abdullah Azzam se dieron a conocer en Oriente Próximo en octubre del 2004 cuando se atribuyeron el mortífero atentado que sacudió la villa egipcia de Taba, en la frontera con Egipto, que acabó con la vida de 34 personas y destruyó parcialmente el hotel Hilton.
A partir de ese instante el mismo movimiento reclamó la autoría de varios ataques en el territorio egipcio, incluido otra brutal deflagración doble en Sharm el Sheij -que mató a 67 civiles- y una acción contra turistas en pleno centro de El Cairo.
De los ataques con coches bomba y suicidas, las Brigadas pasaron a utilizar cohetes. En agosto del 2005 dijeron ser los responsables del lanzamiento de varios misiles contra el puerto jordano de Aqaba también usando el Sinai como plataforma. Sin embargo, en septiembre del 2009 atacaron la población israelí de Nahariya disparando otros dos Katiusha esta vez desde el sur del Líbano confirmando así la movilidad de sus miembros.
Los primeros análisis que ya se han difundido por Internet advierten de las enormes repercusiones que podría tener este suceso acaecido en un pasaje por el que circula el 40 por ciento del petróleo internacional.
La hipótesis de que las Brigadas de Abdullah Azzam hayan conseguido alcanzar Ormuz plantea asimismo la posibilidad de que estén colaborando con la única organización que dispone de una base logística de entidad en la zona, Al Qaeda en la Península Arábiga (AQPA), cuyo cuartel general se encuentra en Yemen, no lejos del estrecho. AQAPA ya había anunciado que pensaba atacar a las embarcaciones internacionales que circularan por las inmediaciones de Yemen.
Esta agrupación ya protagonizó dos atentados marítimos en el 2000 contra el barco estadounidense USS Cole en Adén y contra un petrolero francés en el 2002. Will Geddes, un experto británico citado por Al Yazeera, indicó que la explosión no parecía haber sido muy potente a tenor de las fotos del petrolero distribuidas por la agencia emiratí.
"Parece que no han usado explosivos muy sofisticados pero no sabemos si este es el principio de una serie de atentados en la región. Sería muy grave si un grupo terrorista intenta atacar de nuevo un petrolero. Supondría un golpe masivo y drástico para la economía (mundial)", declaró.