EEUU: LA HORA DE ENFRENTAR EL EJE TEHRAN-CARACAS

The Wall Street Journal *Roger F. Noriega: Embajador de EE.UU. ante la Organización de Estados Americanos desde 2001 hasta 2003 y secretario adjunto de Estado desde 2003 hasta 2005. Investigador visitante en el American Enterprise Institute y director gerente de Visión Americas LLC. 

Los responsables de la política de Washington se pelean por producir sanciones eficaces contra Irán, pero parecen haber ignorado por completo la floreciente relación entre Mahmoud Ahmadinejad con la Venezuela de Hugo Chávez. Esta alianza estratégica constituye para el régimen iraní una fuente clandestina de uranio, lo ayuda a evadir las restricciones sobre el comercio y financiación, y da acceso a los terroristas del Medio Oriente a las armas del arsenal cada vez mayor de Chávez. Así que si Occidente es capaz de implementar un plan de sanciones efectivas, la colaboración de Teherán con Caracas podría cancelarse.

El Sr. Chávez es un autoproclamado enemigo de los Estados Unidos que ha ayudado a los grupos terroristas y regímenes radicales durante más de una década. A pesar de su apoyo a Irán no debería sorprender a nadie que los EE.UU. no se está preparando para responder al eje Caracas-Teherán.

En septiembre de 2005, Chávez mostró su simpatía cuando Venezuela era el único miembro del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) dispuesto para votar en contra de sancionar a Irán por su programa de enriquecimiento de uranio ilegal. Cuatro años más tarde, durante la octava visita de Chávez a Irán, llamó a ese país "aliado estratégico". El 11 de septiembre de 2009, en una entrevista en el diario francés Le Figaro, agradeció a Irán por ayudar a Venezuela desarrollar su propio programa nuclear. De hecho, los dos gobiernos formalizaron su colaboración "en el campo de la tecnología nuclear" en un acuerdo firmado en Caracas en noviembre de 2008. Y, en medio de una crisis fiscal aplastante, en diciembre pasado, Chávez ordenó a su tesorería canalizar otros US$50 millones para un programa nuclear secreto, según un documento secreto hecho llegar a mí por una fuente en Venezuela. Aunque Chávez ha denunciado los informes de actividades mineras de uranio en Venezuela, como "mentiras" y "parte de un plan imperialista", la compañía canadiense de exploración de uranio U308 Corp. anuncio que ha registrado una importante fuente de uranio en la cuenca del Roraima, ubicada en la frontera entre Guyana y la provincia venezolana de Bolívar. Irán y otros individuos del Medio Oriente operan una fábrica de tractores, una planta de cemento y minas de oro en esta región. Dos de estas instalaciones cuentan con puertos privados sobre el río Orinoco, para el acceso sin trabas al Atlántico. Una de estas operaciones, la fábrica de tractores Ven-Iran era el destinatario original de 22 contenedores interceptados por las autoridades aduaneras turcas en el puerto de Mersin, en diciembre de 2008. Llevaban un "laboratorio de explosivos" y de nitratos y sulfitos, productos químicos que se utilizan para la fabricación de explosivos.

Estas operaciones industriales son sólo la punta del iceberg. Las empresas conjuntas venezolanas e iranies y otros proyectos , alcanzan un total de al menos US$ 30.000 millones de dólares entre empresas de fachada, las que se pueden utilizar para ocultar transacciones multimillonarias. Además, Irán ha creado varias instituciones financieras importantes en Venezuela  a través de bancos locales para obtener acceso al sistema bancario mundial, eludiendo las sanciones decretadas por el Consejo de seguridad dela ONU

Debido a que Venezuela apenas puede cubrir su demanda interna de productos petrolíferos refinados, algunos han dudado de que el señor Chávez puede hacer valer su promesa de septiembre 2009 para abastecer al régimen de Mahmud Ahmadineyad con 20.000 barriles de gasolina al día, para suavizar el golpe previsto por las sanciones a Irán . Si la comunidad de Inteligencia de EE.UU. está prestando realmente atención a esto, debería tomar nota de que se sabe lo que el Sr. Chávez le dijo a su homólogo iraní en Caracas en noviembre pasado: Venezuela ya compra combustible en el mercado internacional para el traslado a Irán, según un relato bajo secreto recibido en una reunión que sostuve con fuentes venezolanas.

Las relaciones de Irán también ha ayudado a impulsar el apoyo venezolano a los radicales de Medio Oriente. En noviembre pasado, un comando israelí de la Marina de Guerra se apoderó  del carguero Francop, que transportaba 36 contenedores con 500 toneladas de cohetes Katyusha, morteros, granadas y medio millón de rondas de municiones para armas automaticas durante su travesía camino a Siria, pero en última instancia, con destino a Hezbolá en el Líbano. El envío letal había dejado el puerto venezolano de Guanta al mismo tiempo que el canciller venezolano, Nicolás Maduro, estaba de visita en Damasco, Siria para entregar un mensaje personal del Sr. Chávez a Bashar al-Assad.

Debido a que los EE.UU. está decidido a ignorar lo que se descarta y cataloga como "provocaciones menores", Washington se ha negado a tomar cualquier acción eficaz contra el apoyo de Chávez a los terroristas colombianos y su complicidad en el tráfico de drogas. Tal vez sus lazos con Irán será un elemento que altere la situación. Cualquier programa de sanciones graves deben tapar los huecos abiertos por los negocios de importancia y las relaciones bancarias entre Irán y Venezuela. El apoyo de Teherán a las ambiciones nucleares de Chávez debe estar sometido a un riguroso examen de la OIEA. Las autoridades venezolanas, la compañía petrolera estatal PVSA, y otras instituciones financieras deben ser investigados y sancionados por complicidad en transacciones financieras ilegales. El apoyo de Chávez a grupos terroristas en las tres Americas y más allá, debe ser impugnada como una amenaza a la paz y un acto de agresión en virtud del Capítulo 7 de la Carta de las Naciones Unidas.