Durante 2009 España fue blanco de denuncias de torturas, abusos por parte de las fuerzas de seguridad, maltrato de niños inmigrantes en centros de detención y violencia social contra minorías, según el informe anual del Departamento de Estado de Estados Unidos.
España ha roto su imagen internacional de una monarquía democrática y moderna, respetuosa de las garantías consagradas en la Carta Fundamental de DDHH. En los países vecinos al reino de España se dice "España no es Europa", de hecho, los españoles acostumbran decir "Voy a Europa", cuando cruzan sus fronteras por tierra. Esa percepción interna y externa sobre España, ha sido confirmada. No solo por el trato vejatorio que se traduce en la negativa de ingreso al país a estudiantes de estudios superiores ya matriculados en universidades españolas, científicos que debían realizar ponencias en congresos de especialidad o simples turistas. España ha sido develada en su faceta más cruda y violenta. La violencia del Estado contra el ser humano.
El informe apunta a "informaciones comprobadas de abusos contra inmigrantes adultos y maltratos a niños inmigrantes en centros de detención" por parte de miembros de las fuerzas de seguridad. En total, según el Coordinador para la Prevención de la Tortura, hubo 520 informes de tortura y maltrato, en el 2007 España registro 720 casos denunciados.
CAMPOS DE CONCENTRACIÓN PARA EXTRANJEROS
El texto menciona también denuncias de 85 detenidos en centros de detención para extranjeros en Madrid, en las que a los afectados las autoridades Españolas les obligaron a desnudarse, les golpearon y les amenazaron. Así como también la comida que se les proporcionó contenía sedantes. Las autoridades retrasaron la asistencia legal y la comparecencia ante un juez a los detenidos, agrega. Grupos judíos denunciaron actos de antisemitismo y grupos musulmanes informaron de discriminación social. También hubo "actos de violencia social contra otras minorías", indica el informe, que recoge además denuncias de violencia doméstica y tráfico de personas.
Los llamados Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) en España, han sido objeto de graves acusaciones de violaciones a los DDHH, en donde inmigrantes han sido sometidos a torturas, tratos vejatorios y sedación, incluido niños.
En el 2009, recuerda el informe, la organización terrorista ETA asesinó a tres personas y dejó heridas a unas 65 en un total de 25 atentados. Treinta y cinco miembros de ETA resultaron detenidos en España y 17 en Francia, así como 13 personas supuestamente implicadas en la campaña de violencia callejera de la banda.
Violencia doméstica
Por otro lado, el Departamento de Estado menciona también la violencia doméstica y cita un informe del Consejo General del Poder Judicial para indicar que las mujeres españolas presentaron 145.125 quejas de abusos por parte de sus parejas o ex parejas. Aborda asimismo el tráfico de personas y denuncia como "un problema" el de mujeres adolescentes para su explotación sexual. Señala, en ese sentido, que las mujeres víctimas de tráfico tenían entre 18 y 24 años, aunque según distintos informes también había niñas de 16 años. Las mujeres procedían sobre todo de América Latina, Europa del Este y el África Subsahariana. Para el ingreso de mujeres adolescentes sometidas a la explotación sexual, la policía española fue mas permisiva que con los inmigrantes encarcelados en los centros de detención. Un doble standar al cual España peligrosamente se esta acostumbrando.
"Hubo también informes de tráfico tanto de mujeres como de hombres para su explotación laboral" y se produjo un aumento en el número de menores traficados para la mendicidad.
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