EVO MORALES SUFRE AUSENCIA DE PRESIDENTES EN ACTO DE POSESIÓN DEL MANDO

Sólo presidentes Chávez, Correa y Lugo asistieron a acto en que Evo inició nuevo período. No estuvieron Lula, Bachelet ni Cristina K.  

PHILLIP DURÁN / Desde La Paz, EMOL.com

"Entrega el mar, devuelve el mar...", gritaron algunos de los ciudadanos paceños apostados en la Plaza Murillo, a las afueras del palacio de gobierno y la sede del Congreso de Bolivia, mientras la Presidenta Michelle Bachelet salía de la extensa ceremonia en que Evo Morales renovó por cinco años más como Mandatario de ese país.
La Presidenta ya había abordado el tema marítimo a primera hora de ayer, mientras visitaba un hospital para niños. Ahí, Bachelet destacó que en 2006 había acordado con Morales una agenda de 13 puntos, en la que "hemos hecho progresos importantes". "Y todos esperamos que en los años venideros nuestros Estados continúen profundizándola", agregó.
Aludía así a la agenda que, en su punto sexto, contempla el "tema marítimo", pero cuyos detalles son poco conocidos.
Por lo mismo, cuando fue consultada sobre qué esperaría que hiciera sobre este punto específico su sucesor, Sebastián Piñera, ella reforzó su mensaje. "Lo que tiene que hacer cualquier gobierno en Chile es seguir profundizando todos los puntos de trabajo en una agenda que ha sido concordada en común", dijo la Mandataria.
La postura asumida ayer por Bachelet se produjo sólo días después de que Evo Morales dejara entrever su inquietud por la actitud que tendrá Piñera ante la aspiración boliviana de una salida al mar. En La Paz creen que el nuevo gobernante chileno restringirá al máximo el diálogo sobre este punto.
Dicha inquietud tuvo su origen en el debate presidencial de hace dos semanas entre Piñera y Eduardo Frei, cuando el actual Presidente electo dijo que no conversaría sobre cesión de soberanía y que sólo tenía en carpeta mejorar el acceso boliviano al Pacífico, frase que es leída en la diplomacia boliviana como "simples facilidades portuarias". Morales respondió el martes que "cualquier compromiso es de Estado a Estado", y su canciller, David Choquehuanca, pidió mantener la agenda bilateral.
Aunque durante su período Bachelet tampoco manifestó expresamente que conversaría una fórmula con soberanía, sí acordó con Morales en 2006 que la agenda de 13 puntos sería "sin exclusiones". La Paz teme perder ese espacio de conversación.
Y así lo hizo saber ayer con claridad el propio Morales, durante su discurso en la ceremonia de posesión. "Compañera Bachelet, queremos continuar estas relaciones de respeto mutuo con el nuevo Presidente; saludamos desde acá, en la democracia gana la izquierda o la derecha, pero es democracia y nosotros la respetamos. Pero también quisiera que se respete esta agenda de 13 puntos para seguir debatiendo el tema del mar", indicó.
En la actual administración consideran como un "error táctico" la actitud asumida por Piñera. Argumentan que al endurecer el discurso, se obliga a Morales a hacer algo similar. "En tres meses tendrá a los bolivianos llamando a Chile a dar una salida al mar y recurriendo a los foros internacionales para presionar", dicen personeros del gobierno.
Sobre todo, acotan algunos, considerando que la nueva Constitución boliviana fija como un "objetivo permanente" del Estado "la solución efectiva al diferendo marítimo a través de medios pacíficos y el ejercicio pleno de la soberanía" sobre un territorio que le permita acceso al Océano Pacífico.

Salida anticipada

Pese a las señales de sintonía entre Bachelet y Morales, la Mandataria acortó sorpresivamente su agenda ayer en La Paz. Tras la ceremonia de posesión partió pasadas las 14 horas raudamente al aeropuerto, sin quedarse -como tenía previsto- a un desfile sindical e indígena y al almuerzo ofrecido por el gobernante boliviano. Según se explicó en la delegación chilena, lo extenso de la ceremonia -en la que Morales y su Vicepresidente, Álvaro García Linera, hablaron durante tres horas- complicaba la agenda de Bachelet, que debía estar en la noche en Valparaíso para inaugurar los Carnavales Culturales.
Con todo, la Presidenta pudo saludar a los pocos dignatarios que asistieron a la cita: el venezolano Hugo Chávez, el paraguayo Fernando Lugo, el ecuatoriano Rafael Correa y el príncipe Felipe de Borbón, de España. Llamó la atención las ausencias de la argentina Cristina Fernández de Kirchner y del brasileño Lula da Silva, quien envió a su asesor Marco Aurelio García como representante, y quien desde Brasilia se refirió a la coyuntura política chilena
El Presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, llamó ayer a la izquierda brasileña a unirse y presentar una candidatura presidencial única, tomando como ejemplo la derrota de la Concertación en Chile.
El Mandatario recalcó que el resultado electoral chileno "es una prueba de que no nos podemos dividir", manifestando que los partidos de su sector deben integrar un frente único que respalde a la candidata oficial de su partido, Dilma Rousseff (PT) aliada y fanática de Hugo Chavez, quien enfrenta -entre otros- la oposición del diputado socialista Ciro Gomes.
En tanto, ayer la Cancillería brasileña reveló que Lula envió el lunes un mensaje de felicitación al Presidente electo, Sebastián Piñera. "Le pido que acepte mis votos de éxito al frente de los destinos de Chile. Estoy seguro de que, bajo su liderazgo, Chile seguirá comprometido con la integración y el desarrollo de América del Sur", dice la misiva.