“Al cumplir 62 años de la fundación de esta base y con el orgullo de ser la dotación del Bicentenario, conservamos el compromiso de entrega, sacrificio y tesón por mantener esta unidad, en el pie que se encuentra hoy, mejorando y optimizando cada día más los procesos”, fueron parte de las palabras del Comandante de la Base Antártica “Capitán General Bernardo O’Higgins”, Teniente Coronel Jorge Bravo Almarza, al celebrar el aniversario de la permanencia ininterrumpida del Ejército de Chile en el continente Antártico, el 18 de febrero.
Departamento de Comunicaciones del Ejercito de Chile
Junto a los 22 hombres que componen la dotación que llegó en noviembre del 2009, y con la presencia del Comandante de la División Logística del Ejército, General de Brigada Carlos Matus Rojas, el Comandante del Departamento Antártico, Coronel Rafael Castillo Maturana, la ceremonia se llevó a cabo en el salón de formación donde también asistieron invitados civiles y militares. Entre ellos destacan la historiadora del Centro de Estudios Hemisféricos y Polares, Consuelo León W.; el arquitecto de la Universidad de Magallanes, Max Aguirre G., y el topógrafo Roberto Sobrazo Torres, quienes se encuentran desarrollando -en cada una de sus áreas- importantes proyectos relacionados con la construcción de la Base O’Higgins en 1948. Además, integraron la delegación Edith Flores H. y Elías Barticevic C., representantes del Instituto Chileno Antártico, organismo que promueve el desarrollo de la investigación científica, tecnológica y de innovación en la Antártica, junto con el Capitán de Corbeta Pablo Correa, del ATF “Lautaro”, remolcador de la Armada de Chile, que entre sus misiones traslada personal y carga, entre las Base Frei y la Base O’Higgins. En la oportunidad, el Coronel Castillo, Jefe del Departamento Antártico, unidad asesora en lo atingente a la Política Antártica del Ejército, destacó la importancia de tener a un grupo de hombres de la Fuerza Terrestre en el continente antártico, cuando la patria cumple 200 años de vida independiente. Esta es la razón por la que dicho departamento creó la Moneda Bicentenario, que destaca la frase “Chile y su Ejército: 200 años de compromiso”, la que se entregó a cada integrante de la dotación 2010, como una forma de destacar, estimular y fortalecer el compromiso que adquirieron cuando decidieron ser parte de esta misión, “la que requiere de gran dedicación y compromiso profesional e histórico, con aquellas dotaciones que desde 1948 han permanecido haciendo soberanía territorial en este continente”, enfatizó el Coronel Castillo, quien también integró la dotación de Base O'Higins en 1996. Finalmente, el Comandante de la División Logística, General de Brigada Carlos Matus Rojas, expresó -en nombre del Comandante en Jefe del Ejército- el afecto, orgullo y reconocimiento que éste siente por el trabajo logrado por la dotación, especialmente en el año del bicentenario. “Ustedes están haciendo soberanía, patria y cooperando con el desarrollo científico del país, por lo que siéntanse orgullosos de su entrega y compromiso”.
La dotación militar está compuesta por tres oficiales y 18 integrantes del cuadro permanente del Ejército de Chile. Junto a ellos, desde el 2009 se incluyó a un efectivo de Carabineros, quien participa como un integrante más del equipo, encuadrado en el grupo meteorológico de la base. Además, durante el período estival, un suboficial de la Armada asesora en materias de Alcaldía de Puerto. Entre las misiones que deben realizar durante el año que dura la destinación, una de las más importantes es mantener la presencia en la Antártica, es decir, ejercer la soberanía nacional en ese continente. A la vez, deben apoyar las investigaciones científicas y exploraciones al interior de la península, además de preservar el medio ambiente, emitir informes meteorológicos diarios y mantener operativa la Base O’Higgins. La Base se compone de un módulo principal de 1.600 m2, distribuidos en dos pisos, con dependencias destinadas a oficinas, casinos, dormitorios (cada integrante de la dotación tiene uno), cocina, enfermería, patio interior. Asimismo, realizan actividades deportivas en el gimnasio de 250 m2, y rutinas de ejercicios en una sala de musculatura, con máquinas de alta calidad.
La base tiene capacidad para 60 personas de forma cómoda. Quienes la visitan, especialmente representantes del mundo científico para desarrollar proyectos de investigación, deben seguir una “Guía de comportamiento para visitantes”, la que considera mantener la pureza de la Antártica, respetar áreas protegidas y sitios históricos, no dañar la flora y fauna, respetar la investigación científica, entre otros, destacando que las actividades antárticas de cualquier índole estarán siempre asociadas a las medidas generales y específicas para la protección del medio ambiente antártico y los ecosistemas, tendientes a eliminar o minimizar los impactos provocados en el área, conforme al Tratado Antártico y Protocolo de Madrid. Durante la última década, las labores y actividades -especialmente científicas- en el continente blanco, se han incrementado y con ello la materialización y actualización de las políticas, tanto nacionales como institucionales, que buscan el logro de los objetivos estratégico que permitan consolidar y fortalecer la proyección de Chile en el Continente. Por lo anterior, la visión institucional se enfoca principalmente en mantener la presencia permanente del Ejército en el territorio Antártico chileno, buscando mejorar constantemente la calidad de vida de su personal. A la vez, estudiar y proponer el estudio de nuevas bases refugios, especialmente en dirección al Polo Sur, de acuerdo a las necesidades y recursos. También se considera de gran importancia participar con personal especialista, brindando apoyo logístico a las expediciones científicas y/o de exploración en el extenso territorio antártico, que realicen organizaciones nacionales e internacionales. A su vez, y de acuerdo a disponibilidad de medios y de información, se desarrolla la cartografía terrestre del sector antártico nacional y/o de la Antártica, conforme a las capacidades técnicas que posee el Instituto Geográfico Militar. Siguiendo estos lineamientos, la próxima década la actividad científica en la base tendrá una preponderancia de primer orden, con el incremento de los proyectos nacionales e internacionales en glaciología, biología y geología. De acuerdo a lo anterior, la Patrulla de Rescate Antártica combinada Argentina-Chilena tendrá mejores equipamientos y procedimientos, conforme a las tareas de exploración y rescate en las condiciones más extremas, siendo una ventaja significativa contar con dicha capacidad por el alto riesgo de las actividades científicas, sumado al rigor de la naturaleza en dicho territorio. En este sentido, la Base O’Higgins ha recibido nuevo vestuario para clima extremo, equipo de telecomunicaciones y enlace satelital, un campamento móvil para 8 expedicionarios, moto de nieve (Ski-doo) de avanzado diseño y mayor potencia, que en conjunto a un entrenamiento previo, permite disponer de una capacidad operacional con altos estándares.
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