CHILE CREA OFICINA DE ESTUDIOS DE FENOMENOS AEREOS ANORMALES

A comienzos de enero el gobierno de Chile, lanzo el CEFAA Comité de Estudios de Fenómenos Aéreos Anómalos

A pesar de haberse creado en 1997, no fue hasta ahora que el gobierno chileno no dispuso su implementacion real, financiamiento y dedicacion exclusiva al estudio y seguimiento de los Fenómenos Aéreos No Identificados, FANI.

La red de trabajo de la CEFAA se nutre de colaboraciones con científicos, físicos espaciales y otras agencias extranjeras que certifican lo que encuentran. Pero a diferencia de varias de esas agencias, la chilena trabaja bajo la normativa de la ley de transparencia. “Eso de alguna manera nos ayuda a caracterizar el fenómeno de mejor forma, un trabajo serio que cualquiera puede venir a pedir”, aclara el general (R) de aviación Ricardo Bermúdez sobre el tema.

De la totalidad de casos que ha recibido la CEFAA, el ex piloto habla de los FANI (Fenómenos Aereos No Identificados) que en un 96% sí son perfectamente explicables. De ahí, solo el 4% restante pasa a un nivel de estudio mas preciso, clasificándolo recién  como un OVNI, en la mas estricta acepción de la denominación, es decir tan solo un objeto volador que no ha podido ser identificado. El general Bermudez se cuida de referirse a un origen extraterrestre, simplemente explica que el fenómeno no tiene una explicación que satisfaga al comité. 

General (R) Bermudez en las instalaciones del CEFAA

El método CEFAA exige que el testimonio o prueba se investigue de inmediato antes de que la evidencia o relato se “contamine”. Para cotejar ese tipo de dudas, la agencia está en contacto simultáneo con un control oceánico internacional que monitorea todo el Pacífico además de partners en Dinamarca, Rusia, Japón, China, Uruguay, EE.UU., Bélgica, Francia, Perú, Ecuador, España, Brasil y Australia.

“Cuando países como Japón o Corea lanzan un vector o satélite informan a este centro y lo mismo cuando cae chatarra espacial en el Océano o donde sea. Nosotros lo sabemos de forma instantánea, para que un avión en esa ruta sepa que debe adelantarse, atrasarse o desviarse para no encontrarse con ese material". Otras veces el objeto no puede ser identificado y un equipo de siquiatras acredita que el testigo sea de fiar.