Ministro colombiano asegura que el paso de drogas desde Venezuela es preocupante

El ministro de Defensa colombiano, Gabriel Silva expresó este viernes su preocupación ante la posibilidad "de un tráfico libre" de aeronaves cargadas de drogas a través de Venezuela.

El número de vuelos o naves cargadas de drogas que se logran detectar "pasan por territorio venezolano y eso nos preocupa porque el esfuerzo nuestro ha logrado trancar de manera significativa el tráfico de drogas por vía aérea".

"Nos preocupa muchísimo que exista la posibilidad de casi un tráfico libre de aeronaves por territorio venezolano hacia Centroamérica", dijo Silva al ser consultado por reporteros sobre versiones de al menos una avioneta de matrícula venezolana que fue detectada en las últimos días en Honduras, cuyo gobierno interino denunció que portaba droga.

Silva no dio detalles sobre cuántos vuelos podrían salir de Colombia cargados de drogas y pasar por Venezuela o incluso naves saliendo desde Venezuela con droga colombiana pasada por tierra.

El ministro destacó que "hoy en día nuestro principal desafío es el tráfico de drogas por mar en lanchas rápidas y en semisumergibles" o pequeños submarinos fabricados en astilleros artesanales de los narcotraficantes en Venezuela y que se han convertido en la opción para transportar grandes cargas hacia mercados del hemisferio norte.

El miércoles pasado, las autoridades de Guatemala y de la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA) interceptaron un minisubmarino en aguas internacionales y frente a playas del Océano Pacífico guatemalteco. En el aparato fueron decomisadas 10 toneladas cocaína y fueron detenidos tres venezolanos y dos mexicanos, según ha dicho el ministro guatemalteco de Gobernación, Raúl Velásquez.

Funcionarios de Estados Unidos han dicho que el gobierno del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ha fracasado en combatir con eficiencia el tráfico de drogas en su territorio, lo que el dirigente venezolano desmiente y el mes pasado indicó que como parte de los esfuerzos venezolanos antidrogas consideraban permitir a la fuerza aérea derrumbar naves sospechosas de traficar estupefacientes.