LUEGO DE VISITA DE EMPRESAS DE DEFENSA ESPAÑOLAS CHAVEZ VIAJA A MADRID

El consorcio europeo EADS-CASA tiene interes, al igual que Venezuela en dotar a la Defensa venezolana con el mayor avión de transporte militar fabricado por la industria de defensa europea, el A400M. Las tratativas comenzadas por el Ministro de Asuntos Exteriores Miguel Angel Moratinos comenzaron durante la visita que este realizo el pasado Julio.

CIERRE DE NEGOCIOS

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, se reunirá el viernes con el Rey de España, además de con el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, durante la escala que hará en Madrid como cierre de una gira que le ha llevado por Libia, Siria, Irán, Bielorrusia, Turkmenistán y Rusia. Según han informado fuentes del Gobierno, Chávez solicitó ambas entrevistas en un periplo express que tambien incluye reuniónes con empresas del sector de defensa de España.
La escala de Chávez será breve, permanecerá en Madrid alrededor de doce horas.
La reunión con Zapatero estaba incluida ya el viernes pasado en la agenda semanal del presidente del Gobierno.

VISITA PREVIA DE EMPRESARIOS DE DEFENSA

El Ministro de Asuntos Exterioriores de España, Miguel Angel Moratinos viajó en el mes de Julio a Venezuela acompañado por una veintena de empresas españolas, entre ellas la aeroespacial EADS-CASA, que regresa a Venezuela tres años después de que se frustrara su venta al régimen de Chávez de doce aviones militares -diez C-295 de transporte y dos CN-235 de vigilancia marítima-, valorados en 500 millones de euros. Aquella operación se frustró por el veto de la Administración Bush, que no concedió la licencia para transferir a Venezuela la tecnología estadounidense que llevaban incorporada. Ahora, quizás el nuevo clima instaurado por el presidente Obama sea considerado como un aliciente para culminar este tipo de operaciones. Ahora la intencion española es concretar aquella operación frustrada, agregando el gigante de EADS-CASA A400M.

AVIACIÓN MILITAR
Asimismo, acompaño al ministro la empresa Rodman Polyships, que suministra patrulleras de vigilancia a la Guardia Civil Española y que ya ha vendido una treintena de estas embarcaciones a Venezuela. Otras compañías que viajaron con el titular de Exteriores son la empresa especializada en equipos de apoyo para la aviación civil y militar, Einsa, y el fabricante de complementos militares, Skyt.
También viajo a Caracas un directivo de la Factoría Vulcano, que construye para el gobierno venezolano cinco buques destinados a la investigación oceanográfica y sísmica y a detectar bolsas de petróleo en el fondo marino. Aparte de estas empresas, otras que tienen «buenas expectativas» de cerrar algún negocio en Venezuela son las de los sectores de infraestructuras y energía. Es el caso de Repsol YPF, que podría cerrar una importante operación para los campos petrolíferos del Orinoco. También hay oportunidades en el sector ferroviario, ya que Chávez tiene el viejo plan de construir cinco mil kilómetros de trazado ferroviario. Asimismo, el Metro de Caracas tiene pendiente su ampliación. Las otras empresas que se sumaron al viaje, son las siguientes: Banco Santander, BBVA, Alstom, CAF, Iberdrola, Abengoa, Telvent, Talgo, Siemens, Técnicas Reunidas, Ineco, Elecnor, Nova, el fabricante de motores Grupo Guascor, Domingo Alonso y Duro Felguera.

Acompañado por estos empresarios, Moratinos tenía previsto reunirse con Hugo Chávez en un almuerzo después de presenciar la firma de unos contratos. La comida habría coincidido con el cumpleaños de Chávez (55 años) y, conociendo al personaje, podría haberse convertido para la delegación española en un evento memorable en el Palacio de Miraflores digno de recordar. Finalmente, el ministro se reunio con el líder venezolano al día siguiente de la celebración.

Los esfuerzos se centraron, según fuentes diplomáticas, en ayudar a los intereses de las empresas españolas del ambito de Defensa, que aún quieren aprovechar las oportunidades de negocio que se presentan en Venezuela, a pesar de la escasa seguridad jurídica que ofrece. La sonada experiencia del Santander, al que el Gobierno de Chávez recompró el Banco de Venezuela, no ha tenido un efecto disuasorio a pesar de haber cobrado sólo US$ 630 millones de los US 1.050 millones de dólares pactados. Venezuela aún debe US$ 420 millones por esta nacionalización sin que se tengan noticias a nivel de Gobierno, sobre cuando la Venezuela de Chávez pagara el total de la expropiación.