En un oscuro calabozo del Helicoide, sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Serbin, antiguo Disip, policía política), situada en el centro de Caracas, se halla tras las rejas el ex gobernador venezolano Oswaldo Alvarez Paz desde el 22 de marzo pasado. El delito, criticar Hugo Chávez y su conexión con los grupos terroristas ETA y las FARC.
Ludmila Vinogradof
Su detención y enjuiciamiento sumarial, ordenado por el Tribunal 25 de Control por los supuestos delitos de «instigación al odio, divulgar informaciones falsas y conspiración», pueden ser castigados con penas desde tres hasta diecisés años de prisión, según refiere el propio Álvarez en un artículo que publicó este miércoles la prensa local.
El 8 de marzo pasado, Oswaldo Álvarez -que fue gobernador del Estado petrolero Zulia en dos ocasiones (1989 y 1992), y candidato presidencial en 1993- fue invitado al programa «Aló ciudadano», de la cadena Globovisión. Entonces criticó a Chávez y sus ataques al juez español de la Audiencia Nacional, Eloy Velasco, al ex presidente del gobierno José María Aznar, a Don Juan Carlos y al «imperialismo yanqui».
Carta desde la prisión
Nacido el 10 de febrero de 1943 en Maracaibo, capital del Estado Zulia, abogado de tendencia democristiana, señala que su intervención en el canal Globovisión «se limitó a criticar severamente esa conducta de Chávez y a exigir las explicaciones y cooperación solicitadas por la Justicia española y necesitadas por la opinión venezolana», añade desde la prisión.
«Estoy recluido por opinar, alertar y criticar al gobierno sobre asuntos que son del dominio público, a los cuales he dedicado buena parte de mi vida», señala en su carta. «Así está Venezuela. Represión, violencia física e institucional para criminalizar la disidencia, cerrar medios e impedir informaciones contrarias al régimen», agrega.
También sostiene que «estamos en una dictadura abierta. Pero, la cuenta regresiva está en marcha». Diversos organismos como el Colegio Nacional de Abogados e internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Amnistía Internacional y Human Rights Foundation, han solicitado la liberación del ex gobernador.
Álvarez Paz siempre ha denunciado la penetración de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), sus campamentos en territorio venezolano, su relación con ETA, los cursos y entrenamiento para acciones terroristas e intercambio de tecnologías.
Sus denuncias corroboran las denuncias del juez Velasco, que «permiten presumir la participación y colaboración de miembros de ETA que viven en Venezuela y funcionarios vinculados al alto gobierno» de Chávez, afirma en su artículo. Oswaldo Álvarez Paz ya forma parte de los 32 presos políticos venezolanos enjuiciados por el delito de disentir públicamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario