Hugo Chávez ordenó ayer a sus ministros que "obliguen" a Empresas Polar, el mayor grupo económico del país, a desalojar una de las propiedades de esa firma en pleno centro de la ciudad de Barquisimeto, en el estado Lara, por considerar que esos terrenos serían más útiles a la comunidad.
La influyente Empresa Polar tiene sus oficinas principales (el edificio del medio) en el centro de Caracas
Chávez indicó que una serie de instalaciones de propiedad de Empresas Polar, ubicados en una céntrica avenida, deben ser desalojadas de esa ciudad. Asimismo indicó que en las dos hectáreas de terreno que ocupan las oficinas de Polar, "se pueden construir viviendas populares" y exigió al vicepresidente de la República, Elías Jaua, ejecutar la medida, "ya". "Allí mismo, en plena avenida Libertador la Polar y nosotros el gobierno buscando terrenos en las afuera de la ciudad para hacer viviendas si podemos hacer ocho o diez tremendos edificios populares ahí mismo en ese terreno que vale oro", agregó.
El enfrentamiento entre Chávez y Polar no es nuevo. Ultimamente el revolucionario lider ha dicho que está dispuesto a expropiar todas las plantas de Empresas Polar. Las autoridades han intervenido varios de sus edificios, supuestamente para garantizar el suministro del arroz y otros rubros incluidos en la lista de productos con precios controlados por el gobierno.
El grupo Polar genera unos 30.000 empleos directos y 180.000 indirectos, posee 17 centros de producción en Venezuela y tres en Colombia. Fabrica cereales, margarinas, salsas, quesos, vinagres, enlatados, bebidas gaseosas, helados, productos de mar congelados, alimentos para animales, cerveza y vinos, señaló Associated Press.
La orden presidencial se produjo ayer durante el acto de inauguración del Hipermercado Bicentenario de Barquisimeto, creado luego que Chávez ordenara en enero la expropiación de la cadena franco-colombiana Éxito y sus sedes en varias ciudades. El gobierno alegó que la empresa estaba incurriendo en "remarcaje de precios" y "restricción de la oferta".
Las intervenciones y expropiaciones de empresas se enmarcan en lo que Chávez ha denominado la "tercera fase" del proceso para instaurar en Venezuela un modelo socialista. En marzo del 2009, Chávez tomó una decisión semejante a la de Polar respecto a una propiedad de la embotelladora Coca-Cola en una barrio pobre de Caracas. La empresa aceptó trasladarse tras un acuerdo con el gobierno.
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