Dicho sector pasó de una posición observadora, muy cauta por lo demás, a la acción. Dio tribuna y difusión a la casi no escuchada voz de la administración interina de Micheletti. Semanas previas a la publicación, se podía leer en las expresiones e ideas de sus columnistas estables la molestia reinante en ese sector, criticando la falta de apoyo de la administración Obama a la defensa y apoyo de la democracia en Honduras. Que es percibida al interior del sector como legitima y acorde a las circunstancias excepcionales, que finalmente lograron detener el avance de la ideología de Hugo Chávez y sus socios del ALBA.
Micheletti mas que dirigirse al núcleo de derecha norteamericano, le habla desde la jurisprudencia del derecho a la sociedad estadounidense usando un potente altavoz: "En los últimos días, la retórica de los aliados del ex presidente Manuel Zelaya también ha predominado en los medios de comunicación en Estados Unidos. La peor distorsión es la repetición de la falsa aseveración de que el señor Zelaya fue destituido de su cargo por el ejército y por ser un "reformador". Lo cierto es que fue destituido por un gobierno civil democráticamente elegido porque las independientes ramas judicial y legislativa de nuestro gobierno dictaminaron que había infringido nuestras leyes y constitución."
Luego de enumerar los detalles del proceso jurídico que se cristalizo en la destitución de "Mel", Micheletti logra introducir su explicación, situando al lector dentro del contexto real de la compleja situación político social de esas cruciales horas, al justificar la expulsión de Zelaya antes de un juicio previo: "Pero también hay que entender la decisión en el contexto de un temor cierto por la probada disposición del señor Zelaya a infringir la ley y participar en actos de violencia callejera."
EL TIEMPO ES ORO
Senador (R) Jim DeMint de Carolina del Sur
LA BASE JURIDICA QUE COMPLICA A ZELAYA
El gran plus de la nueva administración Hondureña es el hecho de que es encabezado por los poderes del estado. No existe frente a la opinión pública internacional una figura altamente desprestigiada, como una junta militar de generales de fiero aspecto. Son las instituciones del estado las contra parte de Zelaya. El Congreso, La Corte Suprema, la Fiscalía Nacional y hasta el propio partido del depuesto presidente, como muy bien lo deja establecido Micheletti en su columna al pormenorizar e incorporar el hecho no menor de la votación del propio partido del depuesto presidente y a favor de su salida, dice : "Ocho de los 15 votos del Tribunal Supremo fueron emitidos por miembros del propio Partido Liberal del señor Zelaya. Es extraño que aquéllos que hacen propaganda a favor de Zelaya y hablan de los principios de derecho olviden mencionar la decisión unánime del Tribunal Supremo con mayoría del propio partido del señor Zelaya".
Dentro del tiempo que resta hasta las próxima elección presidencial hondureña, esta por verse que efecto surte el apoyo de los medios como WSJ a la Honduras de Micheletti o que tanto ayudara la visita del senador (R) Jim DeMint de Carolina del Sur, quien llama a Zelaya un “dictador estilo Chávez” y un “líder ilegítimo” exigiendo al presidente Obama que debería “apartarse de déspotas” por que “EE.UU. debe dar todo el apoyo a la gente de cualquier país que estén luchando por los mismos valores que compartimos y defendemos en EE.UU.”. Por lo visto, las tendencias pro destitución de Zelaya se están moviendo proactivamente, aunque en forma un tanto tardía dado que no lograron bloquear la suspensión de ayuda Norteamérica a Honduras, pero si aportando aun mas la sensación de legitimidad de las acciones de los poderes legislativos y judicial hondureños, que son quienes finalmente tomaron la decisión de deponer al presidente en ejercicio.
VER ARTICULO COMPLETO DE MICHELETTI EN EL WAL STREET JOURNAL, PINCHANDO AQUI.
Intelligence & Security Service
No hay comentarios:
Publicar un comentario